El nivel de inseguridad en Masaya creció. Al anochecer, y en especial durante la madrugada, la incertidumbre se mantiene en los dueños de negocios por el temor a que sus locales sean saqueados.
Por esa razón, la empresa privada, el Movimiento 19 de Abril de Masaya, comerciantes, Iglesia católica y la Policía Nacional se unieron contra los saqueadores.
La Policía está representada a través del subdirector de la Policía Nacional, comisionado general Ramón Avellán, quien se comprometió a iniciar el patrullaje y la vigilancia desde este mismo jueves en la ciudad, exceptuando el barrio Monimbó, por el rechazo de los habitantes hacia la institución.
Parte de los pobladores del barrio Monimbó se reunieron poco antes de las 10:00 p.m. de este jueves en la placita del mismo nombre para exponer que mantienen su rechazo a la Policía y ratificar que sus barricadas y lucha permanece en contra del gobierno de Daniel Ortega.
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Asimismo, uno de los integrantes del Movimiento 19 de Abril de Masaya también aclaró que la Policía no puede entrar al barrio Monimbó y que el acuerdo que se obtuvo con los comerciantes, por la tarde, no significa que el pueblo de Monimbó se ha rendido, al contrario, se mantiene activo en la defensa por una patria libre.
Ciudad azotada
La ciudad ha sido azotada por grupos de personas que aprovechan la madrugada para asaltar los negocios y llevarse todo. En lo que va de la semana cuatro locales han sido saqueados, los últimos fueron una bodega para almacenar quintales de azúcar y un restaurante.
A la vez, el mercado municipal de Masaya, Ernesto Fernández, abrió sus puertas durante la mañana de este jueves, después de tres días de permanecer cerrado y protegido con altas barricadas para evitar el saqueo, según los propios comerciantes.
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Al consultarle al comisionado general Avellán por qué la Policía no había actuado ante los saqueos, explicó que ellos respondían a un planteamiento de permanecer en sus cuarteles. “Recordá que había un planteamiento de que la Policía se acuartelara y lo otro es un reto que tenemos en estos grupos —los saqueadores—, acordate que son grupos de 60, 70, que andan con mortero, andan armas de fuego, difícil, pues, pero bueno, vamos allá con el apoyo de la población, con el apoyo de la Iglesia, con el apoyo del sector comercio (…)”, dijo Avellán.
Los afectados por los robos criticaban que efectivamente la Policía no actuará ante este tipo de actividades delictivas.
Se robaron 350 quintales de azúcar
Ronald Benard Lacayo es dueño de la bodega ubicada en el costado suroeste del parque central de Masaya. En esta había unos 350 quintales de azúcar y todo fue saqueado. Benard dijo a LA PRENSA que, según relatos de amigos que les avisaron sobre el saqueo a su negocio, más de cien personas llegaron al lugar durante la madrugada del jueves, les tomó más de un hora y media entrar, pero se llevaron todo el inventario que era distribuido a los comercios de Masaya.
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Una de las afectaciones directas de este saqueo es que no se solicitará más producto hasta que la situación de seguridad en Masaya mejore, indicó Benard Lacayo. También expresó que “todos sabemos quiénes son, son turbas sandinistas, todos sabemos. Vino la Policía hoy (ayer) aquí en la mañana, les preguntamos y les reclamamos que dónde estaban; ellos dicen que están en sus cuarteles”, expresó el afectado.
“Entonces hoy en día, por lo menos Masaya está a merced de los vagos y de las turbas sandinistas (…)”, indicó Benard Lacayo.
Policía se compromete
Por su parte, el comisionado general Avellán dijo que ante el acuerdo al que llegaron con la Comisión y la Iglesia católica, la garantía del cumplimiento del mismo “es nuestra palabra, y nos comprometimos con la Iglesia, con la ciudadanía que a partir de hoy (ayer) vamos a comenzar a trabajar, estamos claro que es un trabajo arduo, duro, difícil (…)”, expresó.
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Mientras tanto, el padre Bismarck Conde, quien ha estado mediando en toda la crisis que ha vivido Masaya, como parte del estallido social del país, consideró que hay voluntad de las partes y destacó que el acuerdo que se obtuvo con la Policía de Masaya espera que ayude a frenar los robos y la inseguridad.
Rechazan manipulación de medios afines al Gobierno
La comsión que se reunió con el comisionado Avellán aclaró este viernes que ellos apoyan “totalmente” la lucha del pueblo de Monimbó y rechazan la manipulación de los medios del Gobierno “en un intento de dividir al sector comercio, al pueblo de Masaya y a la Iglesia de su feligrasía”.
Transportistas en paro
Los transportistas de Masaya se han apostado en la rotonda de El Coyotepe. Más de cincuenta unidades de buses están en paro indefinido, en demanda que haya una disminución de los precios de los combustibles. La población que desee transportarse debe hacerlo a pie o en vehículo propio. Si una persona va en un transporte “pirata” y este pasa por el tranque, bajan a los ocupantes del automotor, ya que los transportistas aseguran que no es justo que otros se aprovechen de su lucha.
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El transportista Manuel Silva explicó que al sector transporte “el Gobierno de Nicaragua lo está matando a través del combustible”. De acuerdo con Silva, el galón de diésel cuesta en Masaya 115 córdobas, mientras que los transportistas de Managua pagan cuarenta córdobas debido a subsidio gubernamental.
350 quintales de azúcar fueron saqueados de la bodega del señor Ronald Benard Lacayo en la ciudad de Masaya. El afectado señala a las turbas orteguistas como los autores del robo.