Petrona Pérez, de la comarca El Chorro, alertó del fuego en la cañada Los Paniquines, en las faldas del Volcán Cosigüina, El Viejo. De inmediato hubo aviso a las brigadas que constataron que los cazadores incendiaron el sitio. La intensidad de los vientos hace que el fuego se propague con más facilidad.
Cosigüina, reserva natural que ha sufrido de incendios en los últimos años, es visitada por decenas de cazadores cada anochecer para sacar de su habitad a venados, conejos, cusucos, garrobos y cargar con la miel de abejas.
Pérez, que junto a varias cooperadas suele producir y empacar semilla de marañón, lamentó que desde hace dos semanas con las ventoleras los incendios siguen ocurriendo.
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Tras capacitaciones, cerca de un centenar de brigadistas contraincendios de la Península de Cosigüina se mantienen alertas.
La alcaldesa sandinista María del Transito Guevara, confirmó en una reunión que en Potosí – Golfo de Fonseca, se les dotó de materiales para combatir incendios forestales.
“Por las noches desde las lomas se ven los focos por los senderos y se escuchan los disparos cuando detectan a un animalito”, confirmó uno de los pobladores.
En Chichigalpa labor de prevención se hace en bestias
Con las “uñas”, como se dice popularmente en Chichigalpa, se desarrollan labores de prevención para evitar los incendios forestales y hay continuo monitoreo e inspecciones que los guardabosques realizan a caballo, estrategia que ha funcionado en la Oficina Municipal de Gestión de Riesgo.
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La municipalidad aún no se pronuncia con el presupuesto a esta importante oficina donde laboran con escasez de fondos y se espera el apoyo gubernamental con la dotación de equipos.
José María Álvarez Maradiaga, técnico en gestión de riesgo, explicó que están en el centro de los municipios de Chinandega y Posoltega donde se movilizan 100 brigadistas con bombas de mochila y machetes en las comunidades aledañas de Los Pellizcos, Las Brisas, Los Ébanos, Apastepe y Versalles en las faldas del majestuoso Volcán San Cristóbal.
“Esto de la prevención nos ha dado resultado en los últimos dos años (2016 y 2017) que no registramos incendios forestales, estamos en cero incendio y cuando nos reportan quemas en la vecina Posoltega, movilizamos a las brigadas para evitar que se nos cruce a este territorio”, declaró Maradiaga.
Este verano los brigadistas chichigalpinos fueron alertados para conformar 13 kilómetros de rondas cortafuegos en el área protegida vecina al complejo volcánico San Cristóbal-Casita.
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Los representantes de la Oficina Municipal de Gestión de Riesgos se reunieron al iniciar la campaña con los productores privados para que realicen las rondas cortafuegos y la quema sea controlada.
Los brigadistas se movilizan en bestias y al detectar a cazadores les indican que si la reserva se incendia tendrán que responder ante las autoridades.
Somotillo sur es vulnerable
En Somotillo, la zona seca del norte de Chinandega, suele ocurrir quemas en la entrada a las comarcas Las Mesas y Palo Grande, la municipalidad también ha organizado las brigadas contraincendios en este verano.
Mientras, en las comarcas orientales de Chinandega y noroeste del complejo volcánico Chonco-San Cristóbal, la municipalidad ha capacitado a los brigadistas.