Gracias a amigos y aficionados, Nicaragua tendrá su equipo completo en los Juegos Mundiales de Surf que se realizarán este mes en Biarritz, Francia.
Todo inició con Kevin Cortez, Jackson Obando y su mánager Matthew Blevins, quienes decidieron iniciar una recaudación en línea para la participación de los dos surfistas en el evento de la Asociación Internacional de Surf (ISA por sus siglas en inglés).
Cuatro día después de poner en marcha la recolección ya tenían el dinero necesario, un poco más de 6,000 dólares, y después la ola siguió su rumbo.
Tras lograr su meta inicial, Blevins quiso empujar un poco más y surgió el apoyo de algunos entusiastas de este deporte que respaldaron la participación de otros competidores hasta completar el equipo.
Joel Chávez, otro joven surfista, recibió el apoyo de Stephanie Hason, el mismo Blevins consiguió los recursos para incorporar a Sean Pearson y el señor Carlos Deshon aseguró la asistencia del suplente Elton Sánchez.
Los padres de las hermanas Resano, Candelaria y Valentina, costearán la mayoría de sus gastos, aunque también cubrirán uno de sus pasajes aéreos con lo recaudado en línea.
La importancia de llevar un equipo completo es precisamente la posibilidad de que Nicaragua mejore su clasificación como nación.
En la edición 2016 de este evento, realizado en Costa Rica, el conjunto nicaragüense terminó en el puesto 14, puesto que se buscará mejorar, más ahora que estos eventos podrían determinar cupos para la participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, los primeros en los que se competirá en el Surf.
Aunque en años anteriores, el Gobierno había financiado las participaciones de los equipos nicas en estos eventos, tanto en Open como en Junior, esta vez no se contó con los recursos necesario y es por ello que optaron por esta estrategia de financiamiento.
Herramienta
La iniciativa de estos deportistas y entusiastas del surf podría servir de ejemplo a los dirigentes de otras disciplinas, que bien podrían tener una fuente de apoyo para participaciones internacionales con la recaudación en línea.
Los fondos como estos se han vuelto comunes para diferentes causas y las plataformas en las que se hacen tienen las medidas de seguridad necesarias para evitar fraudes, aunque todo depende también del nivel de confianza que generen los creadores de los fondos.