El gobierno del presidente inconstitucional Daniel Ortega, no solo expulsó del país el martes pasado al académico Evan Ellis, como informó LA PRENSA, también obligó a salir a otros dos funcionarios estadounidenses del Departamento de Aduanas, confirmó en Managua la embajadora de Estados Unidos Laura Dogu.
Estados Unidos protestó en Washington ante el embajador de Nicaragua Francisco Campbell, y el portavoz del Departamento de Estado, John Kirby, expresó su “profundo desagrado” por la expulsión.
“Ese tratamiento tiene el potencial de impactar negativamente las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Nicaragua, especialmente en comercio”, dijo Kirby, según reportó AFP.
Dogu dijo que Ellis y los otros dos funcionarios expulsados no andaban juntos, que solo se dio la coincidencia que habían venido en el mismo vuelo y que se hospedaban en el mismo hotel.
“Ellos (los dos funcionarios de Aduanas) estaban aquí en una misión oficial trabajando con empresas privadas para hacer inspecciones de productos que iban a pasar a los Estados Unidos; es completamente normal, ellos de esta oficina están visitando muchos países en todo el mundo”, dijo Dogu.
Ellis había venido al país para hacer investigaciones académicas sobre la posible construcción del Canal Interoceánico.
El “gobierno se vio obligado a retirar a dos personas que, siendo funcionarios del Gobierno norteamericano, y con pasaporte oficial, realizaban en Nicaragua, sin conocimiento y coordinación alguna con nuestras autoridades, tareas propias de la competencia del Gobierno de Nicaragua”, dijo el gobierno de Ortega a través de una nota de prensa, divulgada por la primera dama Rosario Murillo.
“La Embajada de la República de Nicaragua, ante el Gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica, saluda muy atentamente al Departamento de Estado de los Estados Unidos y se refiere al desafortunado incidente que el día de ayer nos obligó a retirar a dos funcionarios del Gobierno norteamericano, que con pasaporte oficial, realizaban tareas de seguridad y certificación de Aduanas y Tránsito de Mercaderías, hacia los Estados Unidos, relacionados con la lucha contra el terrorismo. Esta actividad se realizaba sin conocimiento, y/o la debida coordinación con las autoridades nicaragüenses, lo cual, como debe comprenderse, es muy delicado y sensible”, escribió Campbell en una nota diplomática.
Dogu dijo que los funcionarios hacían la inspección directamente con empresas privadas para que productos nicaragüenses pudieran entrar con más facilidades a su país.
“Aparentemente las reglas aquí han cambiado, nadie comparte esta información con las empresas privadas ni con mi embajada aquí, ni con el gobierno en Washington, si hay reglas nuevas debiéramos entender cuáles son y cómo podemos trabajar en el marco de esas reglas porque no queremos tener problemas y queremos apoyar la prosperidad de Nicaragua”, resaltó Dogu.