Adaptar a legislaciones internas las complejidades de un acuerdo regional entre cuatro países, evacuar entre todos nuevas consultas y ajustar detalles técnicos, algunos de “carpintería” que a diario surgen; han mantenido en suspenso la salida del primer grupo de cubanos varados en Costa Rica.
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En el diálogo entre Costa Rica, El Salvador, Guatemala y México se quiere generar la mayor confianza de que el primer grupo que saldrá por medio de un plan piloto acordado el 28 de diciembre, será de manera segura y con la menor logística posible; lo cual permitiría aumentar el número de vuelos con migrantes de la isla en una mayor frecuencia, según el canciller de este país; Manuel González.
“Hay muchas cosas que constantemente cambian, hay muchas preguntas de la parte técnica de un país sobre qué pasa con esto, qué pasa con lo otro y hay que consultarlo con el resto de países involucrados. Costa Rica no es la que decide todo acá, tenemos que tener el respeto de países que hacen sus preguntas, que tienen sus objeciones, que también hacen sus aportes, aportes que también le pueden servir al siguiente país, o sea es un engranaje bastante complejo”, explicó el canciller González.
“No es que haya grandes secretos (que ocultar), es porque hay cosas que no están totalmente definidas. Saben que cuando cuento la información la comparto, pero si no la puedo compartir o no cuento con ella pues no lo puedo hacer, y así me lo han pedido los países que están acá involucrados y tengo que tener el respeto por ellos de guardar esa discreción”, dijo González en rueda de prensa.
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Reunidos estos cuatro países en ciudad de Guatemala, el 28 de diciembre acordaron un plan piloto que permita una salida gradual de 8 mil cubanos varados en Costa Rica.
Ellos saldrán hacia El Salvador vía aérea desde Alajuela o Liberia, en este país; para que luego continúen en autobuses hacia Guatemala y México, con la finalidad que crucen a Estados Unidos aprovechando los beneficios de la Ley de Ajuste Cubano que estimula a los ciudadanos de la isla a emigrar.
Desgastada económicamente, por la asistencia humanitaria en ya 38 albergues que en el primer mes y medio de estadía le costaba a Costa Rica más de 3 millones de dólares; a este país le urge una solución pronta de esta crisis.
Como ha sido desde el inicio de la crisis (a mediados de noviembre que Nicaragua cerró la frontera para cubanos), Costa Rica depende del resto de países y su deseo de que en esta semana saliera el primer grupo, no ha sido posible por la falta de ajustar detalles.
“Precisamente es imposible confirmar fechas, la intención de todos era que la primera semana de enero iban a salir y no van a salir la primera semana de enero. Decir que es el martes, miércoles cuando no está confirmado eso, es irresponsable porque está sujeto a muchos cambios”, señaló González.
Lo que sí el canciller deseó, es que sea lo antes posible. De ahí que la perspectiva del primer grupo de salida sea la próxima semana, aunque Costa Rica no lo cite textualmente. En ese sentido, la cancillería gestiona para esta semana la instalación de un consulado móvil de Guatemala en Liberia, ciudad del norte de Costa Rica cercana a la mayoría de albergues y donde hay un aeropuerto internacional.
González dijo preliminarmente que un primer grupo será de 180 cubanos varados, quienes saldrían de los 135 grupos familiares con hijos menores distribuidos en los 38 albergues.
“La cantidad depende del tamaño final del avión que pueda estar disponible, lo que calculamos preliminarmente, esto no está confirmado, preliminarmente es que será un grupo inicial de 180 personas”, dijo González.
Sobre los costos, adelantó que deberán pagar un impuesto de salida aérea de Costa Rica de 29 dólares, de 60 dólares en El Salvador y de 10 dólares en Guatemala; tal y como lo contemplan las legislaciones internas de estos países que no pueden cambiar para esta crisis humanitaria. El único país de la ruta que no cobrará visado es México, según el canciller.
La discreción que piden el resto de países en la ruta, es por razones de seguridad; pero además por sensibilidades internas que genera apoyar el tránsito de miles de cubanos, cuando desde cada país que integran el acuerdo miles salen a diario sin apoyo gubernamental alguno y muchos son devueltos por Estados Unidos.
Para este plan piloto, Costa Rica ha contado con el apoyo de la Organización Internacional para las Migraciones, organismo de Naciones Unidas que negocia el costo de boletos con aerolíneas.
El costo del viaje dialogado debe incluir pago de impuestos, el boleto aéreo de Costa Rica a El Salvador, transporte terrestre y gastos de alimentación.
González indicó que las reuniones internas y con el resto de países continúan, para afinar la salida de este primer grupo.
“Son preguntas razonables que si fuera el caso de Costa Rica también las haríamos, y que de esas preguntas se pueden adoptar, se puede aportar y adelantar a eventuales complicaciones, problemática, la logística, el bus donde los espera, si tienen que pasar de la escalinata directo a migración, funcionarios adicionales que se necesitas, son detalles de carpintería”, los que faltan; dijo el canciller.
