La maquinaria por fin lució a todo vapor. Los Gigantes de Rivas, cuya alineación está repleta de bateadores de primera clase, demostró de lo que es capaz al vencer 12-3 a los Indios del Bóer con una ofensiva de 18 hits que se unieron a seis errores de la tribu, quienes vivieron ayer una noche amarga en el Estadio Nacional Denis Martínez.
El dominicano Carlos Sosa, con tres imparables, tres anotadas y tres remolques, fue el eje del ataque, en el cual también sobresalieron los nacionales Jimmy González y Darrell Campbell con tres cohetes cada uno, que hicieron trabajar con más tranquilidad al abridor y ganador, Elvin Orozco, quien caminó seis entradas de siete hits y tres anotaciones, mientras los relevistas Kevin Gadea y Jonathan Loáisiga llegaron filosos.
Por el Bóer desfilaron cinco tiradores. El estadounidense Will Morris abrió y perdió al permitir cuatro carreras en 3.1 entradas. Su salida fue prematura, expulsado por el árbitro principal Allan Reyes tras discutir por un balk. Los relevistas Braulio Silva y Junior Téllez absorbieron la mayor parte del castigo, al admitir juntos nueve hits y siete anotaciones en apenas 1.1 episodios. El debutante lanzador cubano Royd Hernández logró frenar el ritmo de los Gigantes, reduciéndolos a una carrera en 3.1 innings, y para no desgastar más su picheo, el mánager dominicano Eduardo Denis utilizó al bateador David Bergin para tirar el noveno episodio y no lo hizo mal al salir ileso.
Los Gigantes, que llegaron con cuatro derrotas en los últimos cinco juegos, lograron salir del sótano, dejando ahí al Bóer, que ayer estrenó a los bateadores extranjeros Karexon Sánchez y Alexander Márquez, en busca de darle un impulso a la ofensiva, algo que no ocurrió, al menos anoche.
BÓER ABRIÓ EL MARCADOR
Antes que los Gigantes se calentaran, el Bóer tomó la delantera en el primer inning con un hit empujador de Bergin, cuya ofensiva ha sido cuestionada, aunque ayer impulsó dos de las tres carreras de los capitalinos, pero también se ponchó dos veces.
Los rivenses comenzaron su producción con dos anotaciones en el segundo para tomar la delantera 2-1 y jamás la perdieron. Con las bases llenas, un toque largo de Omar Obregón junto con un error del segunda base asistiendo la inicial, se combinaron para las dos carreras.
Otro error y otra carrera en el tercero, más racimo de cuatro anotaciones tanto en el cuarto como en el quinto inning sentenciaron la noche desde temprano.
Sosa estuvo en medio de ambos operativos, con un sencillo empujador en el cuarto y un hit de dos carreras en el quinto. Alen remolcó una en cada entrada con par de hits y Jimmy, De Caster y Sosa anotaron dos veces.
Entre el cuarto y el quinto episodio, los Gigantes anotaron ocho carreras con 10 hits, más una base y un golpe.
EN ERUPCIÓN
Los Gigantes de Rivas dieron ayer 18 hits, la mayor cantidad de esta temporada en la Liga Profesional y en sus últimos dos encuentros han pegado 33 cañonazos.
Carlos Sosa fue el mejor bateador de ayer al irse de 4-3, con una base, tres anotadas y tres remolques. Jimmy González de 4-3 con dos anotadas y una empujada. Darrell Campbell de 5-3 con una anotada. Y Luis Alen de 5-2 y dos producidas.