El proceso para las elecciones legislativas del 6 de diciembre en Venezuela entró este viernes en la recta final con el inicio formal de la campaña, en medio de una compleja crisis económica y el escándalo que generó el arresto de dos familiares de la primera dama por presunto narcotráfico.
La campaña electoral se extenderá por tres semanas. Algunos analistas estiman que esta será una de las campañas más duras de la historia debido al contexto de crisis que atraviesa el país y porque el oficialismo y la oposición se juegan la supervivencia de sus proyectos políticos.
El directivo de la encuestadora local Datanálisis, Luis Vicente León, dijo que aunque la oposición tiene en este momento una “probabilidad de triunfo más elevada”, eso no le asegura que va a ganar y advirtió que los escenarios pueden cambiar en tres semanas.
Por primera vez en 17 años la oposición aparece como favorita con una ventaja de más de veinte puntos porcentuales, según las principales encuestas locales, pero sus dirigentes sostienen que están en desventaja por el uso del oficialismo de los recursos públicos y el control que ejerce sobre buena parte de los medios de comunicación.
El líder opositor y gobernador del Estado central de Miranda, Henrique Capriles, exigió el viernes al Gobierno pronunciarse sobre el caso de los familiares de su esposa y dijo en conferencia de prensa que es “sumamente grave” que los dos detenidos tenían pasaporte diplomático. El excandidato presidencial denunció que las autoridades enviaron a las tropas militares un supuesto comunicado interno en el que les exigían reunir votantes a favor del partido oficialista.
El oficialismo enfrenta el difícil reto de superar el costo político que representa la galopante inflación y severos problemas de escasez que han golpeado la popularidad de Maduro.
20 % es el total de puntos con los que la oposición venezolana aventaja en las encuestas a los candidatos a diputados del oficialismo que representan Nicolás Maduro y Diosdado Cabello.
Ver en la versión impresa las páginas: 8 A