Muy a pesar de los estilos propios, de las costumbres y sobre todo de la moda masculina, antes de vestir una prenda, debés pensar si estás proyectando la imagen que querés que los demás reciban de vos, sobre todo si lo que menos querés es cometer errores que restarán atractivo a tu look.
Evitá llevar las camisas con más de dos botones abiertos si no estás en la playa y huí de las réplicas deportivas de futbol, beisbol o baloncesto, así como de los de tirantes y escotes pronunciados. No usés por fuera las camisetas de cuello en V profundo, sobre todo mostrando los vellos. En el gimnasio obviá las camisetas muy ajustadas y cortas si tenés pancita prominente.
Con los pantalones es común equivocarse con el largo, así que evitá llevar el bajo con mucha tela de sobra. Lo correcto es que caiga un pliegue sobre el calzado y siempre se muestre el tacón del zapato, sobre todo en pantalones de tela. También evitá que su falta de largo haga que al sentarte quede expuesta la piel de tu pierna y que tu tiro no quede demasiado holgado, ni marcando la zona genital.
Otros errores son llevar la ropa demasiada holgada o demasiado ajustada por no respetar la talla correcta o cinturones con hebillas logo que parezcan letreros, gafas de sol XL, sacos o blazers muy ajustados y con arrugas o pliegues en los brazos o espalda.
Omití de tus looks las cadenas, anillos, relojes XL y esclavas de mano, así como llenar los bolsillos de los pantalones y de la camisa con lapiceros, llaves, monedas y más artículos.
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