Para Plácido Domingo, la ópera y el futbol van de la mano. El tenor español ha dado un concierto en casi cada Copa Mundial desde 1990 y se prepara para cantar el 11 de julio en Río de Janeiro, tres días antes de la final del evento.
Pero en una conferencia de prensa el jueves pasado para promover el espectáculo, Domingo habló poco de música y mucho de su otra pasión, el futbol, proporcionando un análisis detallado de lo que los brasileños llaman “el juego bonito”.
De joven, Domingo dijo que jugó como portero hasta que se fracturó un dedo y tuvo que pasar a una posición ofensiva.
“Pero simplemente no era tan bueno”, dijo, mostrando un dedo índice abollado al que llamó un “souvenir” de sus años en el futbol.
SIGUE AL REAL MADRID
Y aún cuando dejó este deporte mantuvo su pasión por el mismo, siguiendo al Real Madrid con tal devoción que el logotipo del equipo decora su teléfono inteligente.
También es devoto seguidor de la selección española, que llegó a Brasil ostentando los títulos del último Mundial y de la Eurocopa más reciente pero quedó eliminada en la primera fase.
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