Alina Lorío L.
3 mil 500 manzanas de bosques de pino se estima que se habían quemado hasta el lunes 21 de abril en San Fernando, aunque el alcalde considera que la cifra puede ser mayor.
7 mil manzanas de bosques de pino resultaron quemadas en el municipio de San Fernando, en la temporada seca del 2013.
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El agotamiento de 200 brigadistas voluntarios que durante toda la Semana Santa trabajaron en el control de incendios forestales en el municipio de San Fernando obligó al alcalde a retirarlos “hasta nuevo aviso” de los sitios donde el fuego avanza sin control.
“Ellos (los brigadistas de Ocotal, Mozonte y San Fernando) tienen mucha voluntad y disposición, pero no podemos abusar de su sacrificio y cansancio, peor cuando vemos que no hay ni la mínima voluntad de los dueños de propiedad en colaborar en el control del fuego”, dijo el alcalde de San Fernando, Melvin Ortez.
Este martes 22 de abril el fuego había arrasado unos seis kilómetros de bosques al norte de San Fernando y por la tarde las llamas avanzaban hacia los potreros vecinos. La esperanza es que este incendio finalice cuando el fuego llegue a orillas de la carretera que comunica a San Fernando con Ocotal.
ESPERANZADO EN LLUVIAS
Casi impotente viendo el desastre que el fuego ocasionaba, Ortez albergaba sus esperanzas en “los jocoteros” o lluvias previas al invierno.
Al mismo tiempo, lamenta que tantos recursos económicos como humanos se invirtieran en algo que “perfectamente podemos evitar, pero muy poco interés existe, sobre todo de los dueños de bosques”.
Productores de San Fernando sugirieron este martes a Ortez la contratación permanente de guardabosques, entre las acciones principales para reducir el daño que el fuego está ocasionando.
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