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La carga de la deuda de España se duplicará respecto del punto en que se hallaba cuando comenzó la crisis de deuda soberana de Europa, erosionando las ventajas económicas que distinguían al país de la periferia de la región y lo protegían del contagio griego.
El Fondo Monetario Internacional prevé que la economía se contraerá 1.7 por ciento este año, impidiendo al país alcanzar sus objetivos fiscales. El déficit, que según estimaciones del Gobierno alcanzó 8 por ciento el año pasado, se reducirá hasta 6.8 por ciento este año y 6.3 por ciento en 2013, pronostica el prestamista de Washington. El objetivo para este año acordado con la Unión Europea es de 4.4 por ciento.
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Los responsables de finanzas se reunieron ayer en Bruselas en el último esfuerzo por salvar a Grecia de la cesación de pagos. España ingresó en la crisis con una deuda pública de 40 por ciento de su producto interno bruto, en comparación con un ratio promedio de 70 por ciento en la región euro. La Unión Europea pronostica que su deuda crecerá casi dos veces para el año próximo, en tanto Moody’s Investors Service dice que España está perdiendo una de sus “fortalezas crediticias relativas fundamentales”.
Los inversores dan a España un descuento de solo 31 puntos básicos sobre el endeudamiento a una década en comparación con lo que cobran a Italia, por debajo de 200 los puntos básicos a fines del año pasado. El rendimiento de España a diez años es de 5.25 por ciento, cuarenta puntos más desde el 1 de febrero.
TIEMPO EN CONTRA
“El tiempo está actuando en contra de España y por eso el déficit debe bajarse abruptamente antes de que sea traspasada la marca crítica de ciento por ciento de deuda/PIB”, dijo Georg Grodzki, responsable global de investigación crediticia en Legal General Investment Management de Londres.
Se pronostica que la carga de la deuda de España aumentará hasta 78 por ciento del PIB en 2013, en comparación con un promedio para la eurozona que crecerá hasta 91 por ciento.
El endeudamiento de España aumentará casi dos veces desde 2008, en tanto el de Italia subirá solo 13 puntos porcentuales hasta 119 por ciento, muestran los pronósticos para la UE. Moody’s, que en 2001 calificaba a España Aaa y a Italia tres niveles más abajo en Aa3, ahora califica a ambos países A3, cuatro categorías por encima de grado basura.
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