Santiago de Chile/EFE
Al menos 37 detenidos y cinco carabineros lesionados dejó la movilización estudiantil que este jueves reunió a nivel nacional cerca de 100 mil personas, de acuerdo a cifras oficiales.
El coronel Víctor Tapia, jefe de la Prefectura Central de Carabineros dijo a los periodistas que la manifestación en la capital se desarrolló con normalidad hasta que “400 o 500 participantes encapuchados comenzaron a lanzar objetos contundentes”.
Tapia precisó que algunos policías presentan heridas de consideración y otros de carácter leve tras el ataque realizado por personas con sus rostros cubiertos en Alameda con Amunátegui a sólo una manzana del Palacio de La Moneda, sede del Ejecutivo.
“Cumplimos la planificación conforme a la autorización y despliegue de la marcha, pero en un momento, sin que existiera ningún tipo de situación que lo justificara, un grupo de aproximadamente 500 a 400 participantes, comenzó a lanzar un sinnúmero de objetos contundentes al personal”, añadió el oficial.
Entre los manifestantes que acudieron pacíficamente a la marcha se encontraban miles de estudiantes secundarios y universitarios, además de profesores, funcionarios de la Asociación Nacional de Empleados Fiscales y miembros de la Confederación Nacional de Funcionarios de Salud Municipalizada.
Tapia reconoce que los enfrentamientos se produjeron al momento en que encapuchados lanzaron piedras y palos contra personal de las fuerzas especiales de carabineros “y cuando realizaron barricadas y un grupo de encapuchados comenzó a arrojar bombas molotov contra la policía.
En tanto, Camila Vallejo, Presidenta de la Federación de Estudiantes de Chile (FECh), dijo esta noche a los periodistas que la movilización reunió sólo en Santiago a unas 100 mil personas.
“Algunos han dicho que la gente no quiere manifestaciones, pero hoy día más de 100 mil personas decimos que sí queremos manifestarnos, que sí queremos participar para recuperar la educación pública y para que el Estado se haga cargo de garantizar el derecho de la educación”, añadió la líder estudiantil.
El estudiantado chileno exige el fin de la educación municipal, que los planteles vuelvan a ser administrados por el Estado y que la tarjeta estudiantil, que permite el pasaje rebajado en la movilización colectiva, sea gratis y rija todo el año.
Asimismo demandan que se acelere la reconstrucción de los colegios dañados por el terremoto del 27 de febrero del 2010 y que se mejoren las condiciones de infraestructura de los establecimientos destinados a la enseñanza técnico-profesional.