MÉXICO/EFE
La gravedad de las últimas agresiones contra indocumentados perpetradas en México hace necesaria una más estrecha cooperación contra la delincuencia trasnacional, afirmó hoy el embajador de México en Guatemala, Eduardo Ibarrola Nicolín.
“México invita a los Gobiernos de la región a seguir estrechando nuestros nexos de cooperación en contra de la delincuencia”, afirmó en rueda de prensa el diplomático, quien participó hoy en la XXII Reunión de Embajadores y Cónsules mexicanos, que durará hasta mañana.
Ibarrola señaló que los inmigrantes son “grupos altamente vulnerables” que son víctimas de organizaciones criminales trasnacionales, algo que preocupa a México y a otros Gobiernos de los países de procedencia de los indocumentados.
“Tenemos que luchar en contra de esta delincuencia. No son agresiones que se estén realizando por actores estatales: son delincuentes o malos elementos de corporaciones pero que son delincuentes”, recalcó el embajador mexicano.
Señaló que sucesos como la masacre perpetrada por sicarios en agosto del pasado año que costó la vida a 72 indocumentados centro y suramericanos en San Fernando, noreste de México, muestran que la delincuencia “no está respetando la vida ni la dignidad de estos migrantes”, sean de donde sean.
“Lo que tenemos que hacer es trabajar juntos, buscar esquemas de cooperación cada vez más eficaces para que los países de la región centroamericana y México, y desde luego EE.UU. y Colombia, podamos trabajar juntos en contra de estas organizaciones criminales”, apuntó.
Neutralizar a los grupos pasaría por “combatirlos con eficacia mediante programas de cooperación” que funcionen mejor y que incluyan aspectos como el de compartir más información de inteligencia.
Ibarrola restó importancia al hecho de que más o menos mexicanos puedan formar parte de estas organizaciones, en las cuales, sostuvo, hay personas de diversos países.
“Más que estar ahora en una determinación de la nacionalidad de las organizaciones, lo importante es reconocer que el fenómeno es de carácter trasnacional” y que tiene “una alta movilidad criminal”, indicó.
El diplomático dijo carecer de detalles de las investigaciones que lleva a cabo la Procuraduría General de la República (PGR, Fiscalía) en torno al supuesto secuestro de unos 50 indocumentados centroamericanos ocurrido en Chahuites, estado de Oaxaca (sur de México), el pasado 16 de diciembre.
A pregunta sobre si México había contestado a la nota diplomática que envió por el caso el Gobierno guatemalteco de lvaro Colom, el pasado 28 de diciembre, dijo que lo importante era que tanto México como Guatemala vean “el problema en la misma dimensión”.
“Se trata de grupos de delincuentes que están atacando a un grupo de vulnerables migrantes precisamente porque son una presa fácil, porque como van migrando no se detienen a denunciar los hechos”, apuntó.
Finalmente, recordó que en materia de tráfico de personas las redes que alientan esta actividad “empiezan en los países expulsores, no están nada más en México sino también en los países de origen y de destino”.
Sobre cuestiones migratorias también y en otro acto celebrado hoy, el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de México (CNDH), Raúl Plascencia, informó que esa institución tiene registrados 214 casos de secuestros colectivos de inmigrantes perpetrados en México el pasado año.