Ricky Martin desató la euforia de unos 50 mil fans que desafiaron el mal tiempo la noche del sábado para asistir al primero de sus recitales en Argentina en el Estadio Monumental de River Plate, donde el cantante meneó caderas al ritmo de Jaleo, María y La Bomba.
Sobre un enorme símbolo de la paz pintado en el escenario, el puertorriqueño abrió con el tema Pégate, un show de dos horas de música y desenfreno colectivo que comenzó con casi una hora de retraso debido a la lluvia que se abatió sobre Buenos Aires.
“Es maravilloso volver a los comienzos”, dijo Ricky, quien extasió a sus seguidores con un rosario de sus temas más exitosos, en el que no faltó Living la Vida Loca y, Por Arriba, por Abajo.