- La millonaria propiedad podría regresar a su creador, por medio de una orden judicial
- Procuraduría General de la República olvidó que casa veraniega se construyó con fondos destinados a víctimas del huracán Mitch
José Adán Silva
Un poco menos de 19 meses bastaron para que la memoria de la Procuraduría General de la República (PGR) dejara fuera de sus prioridades la emblemática mansión veraniega del ex director general de Ingresos, Byron Jerez.
Ubicada frente a las costas de Pochomil Viejo, la lujosa mansión fue intervenida en favor del Estado el lunes 23 de junio del 2003, por orden de la entonces Juez Primero de Distrito del Crimen, Juana Méndez, quien en septiembre del 2002 había dictado sentencia de cárcel contra Jerez por delitos vinculados a la corrupción pública.
Desde entonces, hasta la fecha, la potestad sobre la millonaria propiedad que Jerez se ayudó a construir con fondos públicos destinados a ayudar a las víctimas del huracán Mitch, cayó en el olvidó de la PGR.
La mansión de Jerez fue intervenida por la procuradora auxiliar María Mercedes Aguilar Gallo, quien por mandato judicial delegó la custodia de la casa en manos de un interventor privado.
Sin embargo, el pasado viernes 21 de enero, a Aguilar Gallo se le venció el término de tres días que la Juez Segundo Civil de Distrito, Patricia Brenes, le dio a la Procuraduría para pronunciarse sobre la solicitud de levantamiento de intervención de la propiedad de Jerez.
PGR SE DURMIÓ
Nadie de la PGR se enteró de la fecha, y no actuaron, por lo cual ahora se corre el riesgo de que la propiedad regrese a manos de su antiguo dueño, quien luego de un sobreseimiento judicial se dedica a recuperar los bienes que le fueron confiscados por las autoridades nicaragüenses al fragor de una pálida campaña contra la corrupción.
El ex director de Ingresos, por medio de su hija Valeria Jerez y su esposa Ethel González de Jerez, solicitó el levantamiento de intervención de la propiedad, sin que a última hora se pronunciara la PGR.
LA PRENSA se comunicó con el procurador Alberto Novoa, quien dijo sentirse “sorprendido” por el “atraso” en la intervención de la PGR al respecto.
Una resolución de la Contraloría General de la República determinó que hubo presunción de responsabilidad penal en el Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI) por el desvío de 412 mil dólares que serían usados para obras sociales en beneficio de las víctimas del huracán Mitch que azotó Nicaragua en 1998, pero que terminaron usados para levantar una enorme terraza en la mansión que Jerez se construyó en 1999.
OLVIDO DEL LUJO
La propiedad de Byron Jerez fue levantada en un área de cuatro manzanas de extensión y en su momento se valoró en más de dos millones de dólares (poco más de 32 millones de córdobas).
La casa es de dos plantas, con ocho habitaciones lujosamente acondicionadas, amplios corredores con enormes ventanales, dotados generosamente de hamacas, sofás, canapés y otros muebles finamente acabados.
“VAMOS A ACTUAR”
“Yo estaba fuera del país y no sé qué ocurrió ahí con la procuradora auxiliar a cargo, María Mercedes Aguilar Gallo, pero vamos a investigar y a actuar. En este caso el tiempo no es un limitante, y bajo ningún término vamos a permitir que un monumento de la corrupción que se construyó con dinero para las víctimas del huracán Mitch, sea regresado”, dijo el procurador Alberto Novoa al comentar el tema.