- Conmemoración del 24 aniversario se vio empañada por pleitos políticos
Lucía Vargas C.CORRESPONSAL/[email protected]
La división política entre dirigentes del FSLN en Carazo fue puesta en escena nuevamente cuando este cinco de julio en horas de la tarde el secretario general de ese partido Daniel Ortega no asistiera al acto conmemorativo en la ciudad de San Marcos por conflictos internos, mientras en Jinotepe sus seguidores que lo esperaron hasta las 10 de la noche se tuvieron que ir sin escucharlo a consecuencia de un torrencial aguacero.
En San Marcos se aplazó el acto supuestamente porque el secretario político municipal de ese partido, Denis Fernández, se opusiera a la participación en el mismo del alcalde sanmarqueño, Alberto Reyes.
Según fuentes afines a este partido que pidieron omitiéramos sus nombres por temor a ser reprendidos, Fernández junto a Francisco Vargas y el concejal Ronald Morales, fueron los que se opusieron a que el edil participara en el acto al extremo de pedirle que se fuera de la actividad política.
La fuente dijo que el mismo Ortega llamó y advirtió que si no se ponían de acuerdo él no llegaría a la actividad, lo que al final sucedió, mientras sus seguidores se quedaron burlados, luego de haber estado trabajando durante varios días para montar la actividad.
ALCALDE HERMÉTICO
Al consultar con el alcalde Reyes sobre el tema, éste prefirió callar, tras agregar que desde hace dos meses le aplicaron una sanción por diferencias partidistas, pero no quiso dar mayores detalles.
Se supo que Daniel Ortega, de Masatepe pasó entonces a Santa Teresa, donde hizo un recorrido, mientras en Jinotepe sus simpatizantes lo esperaron fielmente hasta las 9:35 minutos de la noche.
Según la agenda, Ortega culminaría su visita a Carazo en la cabecera departamental, donde cerraría con el acto central, sin embargo apareció como siempre con varias horas de retraso, subió la tarima y coronó a la reina del 24 Aniversario, pero unos minutos antes de las 10 de la noche, un torrencial aguacero disolvió el acto sin que pronunciara una sola palabra.
En Jinotepe hubo críticas fuertes de parte de sus afines, quienes resintieron la falta de consideración del dirigente y señalaron que no se puede seguir jugando con la voluntad del pueblo, al mismo tiempo que exigieron mayor respeto.