Mercedes SequeiraCORRESPONSAL/CHONTALES
La falta de agua para sofocar un incendio ocurrido en la vivienda de madera propiedad de Magdalena Aguilar Sequeira propició que el inmueble fuera reducido a cenizas, después que sus moradores dejaron una candela encendida.
Como resultado, la niña Gelma Walmira Sequeira, de siete años, sufrió quemaduras leves y fue atendida en el Hospital Asunción, de Juigalpa.
Este hecho ocurrió a eso de la 1:30 de la madrugada de ayer en el Barrio San José de Juigalpa, de este municipio, donde los habitantes recurren a las pipas para obtener agua para beber, y no tenían con qué hacer frente a las llamas, pues los bomberos tampoco se presentaron.
La casa estaba construida con madera y plástico, y ante la falta de luz eléctrica, sus habitantes se alumbraban con una candela, la que incendió un mosquitero y originó el siniestro mientras sus moradores dormían, dijo la subcomisionada Fátima Flores, segunda jefa de la Policía Nacional en Chontales.
Tanto Aguilar Sequeira como la menor fueron rescatadas por los vecinos, ya que los bomberos no se presentaron al lugar, aparentemente porque en la localidad no había agua.
ENCUENTRAN FETO EN CAJA DE CARTÓN
Por otra parte, la Policía Nacional encontró un feto de 24 a 26 semanas de gestación en el Barrio “Padre Miguel Confía”.
El feto estaba en una caja de cartón y fue encontrado por una habitante del barrio antes mencionado, que dio parte a las autoridades
El subcomisionado Alejandro Ruiz, de la Dirección de Investigaciones Criminales, dijo que aparentemente el niño nació muerto y de forma prematura en el Hospital Asunción, y que la mamá es una adolescente de 17 años.
La Policía continúa investigando este caso.