- La recesión económica obligó a este sector a tomar algunas medidas como reducción de la jornada laboral e incluso algunas empresas cerraron definitivamente
- Los líderes sindicales despedidos de Chentex, firmaron un acuerdo con la patronal después de arduas negociaciones.
Gabriela Roa Romero [email protected]
Alrededor de 2,500 trabajadores fueron despedidos de las empresas de Zona Franca este año, debido a que muchas fábricas se vieron en apuros económicos al enfrentar bajas en sus pedidos por parte de sus clientes estadounidenses, según los sindicalistas.
Diferentes empresarios coincidieron en aceptar que la recesión económica golpeó este año al sector de zonas francas.
Por tanto, se tomaron algunas medidas administrativas, como reducir la jornada laboral o al personal de la fábrica, solicitar suspensiones temporales y, en el peor de los casos, cerrar la empresa y dejar en el desempleo a la totalidad de sus trabajadores.
Pero, el 2002 promete mejores oportunidades, según funcionarios del gobierno que anunciaron la apertura de nuevas zonas francas en diferentes áreas del país, como Granada, León y Managua, las cuales generarían miles de puestos de empleo.
INTOXICACIÓN MASIVA DE TRABAJADORES
Unos 200 trabajadores fueron trasladados de urgencia en febrero de este año desde la fábrica Roo Hsing Garment a un centro asistencial con fuertes malestares estomacales.
Presuntamente, la cena que ingirieron los trabajadores y que provenía de una empresa italiana, desencadenó una intoxicación colectiva que los llevó hasta el hospital.
Vómitos, diarreas, dolores de cabeza y estómago, náuseas y mareos fueron algunos de los síntomas que obligaron a los trabajadores a detener sus labores en medio de gritos y angustias.
Los exámenes médicos practicados en ese entonces revelaron infección de carácter bacterial en los trabajadores atendidos, por lo que los galenos sugirieron a las autoridades vigilar y supervisar constantemente la calidad de los alimentos que se distribuyen en los comedores para evitar tragedias.
CONFLICTOS LABORALES
Es importante destacar que, durante este año, disminuyeron las huelgas de los trabajadores y, sobre todo, los enfrentamientos violentos.
Por el contrario, en mayo, después de más de 10 meses de intensas negociaciones los sindicalistas despedidos de la fábrica Chentex y sus empresarios firmaron por fin un acuerdo que terminó con un conflicto laboral que trascendió las fronteras nacionales.
Los dirigentes del sindicato de esta empresa, afiliado a la Central Sandinista de Trabajadores (CST), fueron despedidos por la patronal luego de protagonizar una protesta en demanda de mejoras laborales.
Los líderes, al día siguiente de su despido, emprendieron una ardua lucha para hacer cumplir la legislación, hasta lograr el reintegro de una parte de sus dirigentes.
LIBERTAD SINDICAL
El tema de la libertad sindical continúa generando conflicto, especialmente en el régimen de Zona Franca.
Luis Barbosa, Secretario General de la Central Sandinista de Trabajadores “José Benito Escobar” (CST-JBE), anunció que en enero interpondrán una demanda en la Oficina de Comercio de los Estados Unidos contra las empresas de zonas francas.
Los sindicalistas alegan que existe violación a la libertad sindical, a la negociación colectiva, a la prohibición del trabajo forzoso y del horario laboral contemplado en la Iniciativa de la Cuenca del Caribe (ICC), lo cual debería impedir a las empresas de zonas francas estar exentas de impuestos, ya que esta medida se aplica a las que cumplen con las caractrísticas antes citadas.
En caso de que la demanda tome su curso, los sindicalistas esperan que se realicen inspecciones, y de comprobarse las acusaciones solicitarán la suspensión de las empresas implicadas.
DESEMPLEO ABIERTO AUMENTÓ
El desempleo abierto disminuyó durante los últimos cuatro años de 14.3 por ciento a 9.8 en el 2000, según la Dirección de Empleo y Salario del Ministerio del Trabajo (Mitrab).
Sin embargo, para el 2001 el desempleo abierto aumentó de 9.8 el año pasado a 10.7 por ciento.
La encuesta de la Fundación Internacional para el Desafío Económico Global (Fideg) reveló que el 72.3 por ciento de las personas que trabajan, lo hacen en el subempleo.
Según el Fideg, el desempleo abierto aumentó de 11.5 por ciento en 1999 a 13.3 por ciento en el 2000, después de que durante los últimos ocho años había mostrado una tendencia decreciente.
El ingreso promedio de los trabajadores que habitan en el Pacífico aumentó en un 14.9 por ciento entre 1992 y el 2000, pero el poder adquisitivo del mismo se redujo sustancialmente en el mismo período
Según la encuesta, los trabajadores abandonaron la Población Económicamente Activa (PEA) al no encontrar trabajo y migrar a otras zonas, sea dentro o fuera del país.
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