- Se perdieron 78,000 córdobas
Carol MunguíaCorresponsal/[email protected]
La caja metálica de la Comuna, donde se resguardaban fondos hasta por un monto de 78 mil córdobas, desapareció como por arte de magia. Dos investigaciones simultáneas establecerán si existe o no responsabilidad penal de los funcionarios municipales.
El comisionado Erick Brenes, jefe de Investigaciones Criminales de la Policía Nacional, informó que un equipo de investigación trabaja en una lista de sospechosos. “Todos son sospechosos mientras no se esclarezca el hurto con abuso de confianza”, indicó el jefe policial.
EXPLICACIÓN DÍA POR DÍA
El hecho fue denunciado por Fabián Velásquez Bustamante, financiero de la Alcaldía, quien indicó que “los 78 mil córdobas son el producto de una partida que se recibió de parte de transportistas que pagaron una concesión para taxis ruleteros”.
El funcionario relató a LA PRENSA que ese dinero no estaba enterado a las arcas municipales porque “estaba entregando recibos oficiales de la Alcaldía en sustitución de documentos provisionales que la Comuna entregó al grupo de transportistas”, operación que solamente conocían el Concejo y el financiero.
¿CUÁNDO FUE?
“El 24 de diciembre atendí al último concesionario y le entregué recibo original. Salimos de descanso, y el 26 de diciembre nadie se presentó a reclamar los correspondientes documentos, por lo tanto ignoro si ese día ya la caja metálica con los fondos resguardados en el archivo de la Secretaría, había sido sustraída”, indicó Velásquez.
Fue hasta el 27 que recibió una llamada de su hermano, el ahora concejal Julio Velásquez, que se enteró de la desaparición de los fondos. Julio integra la Secretaría del actual Concejo, al ser electo en las pasadas elecciones municipales, mientras su hermano, Fabián, tiene doce años de trabajar en la Comuna chinandegana.
DECLARACIONES
La Policía Económica investiga el orden de los recibos y facturas en busca de anomalías.
Por su parte, el equipo de investigación recibe la declaración de los empleados más cercanos al área financiera. Cuatro empleados menores, entre ellos la secretaria y la conserje, ya rindieron su declaración en la unidad de Policía.
Se conoció que el financiero municipal declaró que los días 26 y 27 de diciembre, encontró abierta la puerta de su oficina y puso como testigo a un vigilante al que le comentó la irregularidad.