Martha Marina GonzálezCorresponsal/ ESTELÍ[email protected]
El joven campesino Luis Ángel Cruz Tercero, de 28 años de edad, pereció la noche del sábado en Costa Rica, al ser atropellado cuando iba en una bicicleta a ejercer labores de vigilancia en una bodega. Sus restos no han sido repatriados a su lugar de origen, San Juan de Limay, Estelí.
Según el padre de la víctima, Paulo Cruz Pérez, su hijo había viajado a Costa Rica hace cuatro meses debido a la falta de empleo en Nicaragua. Él se había ido a trabajar con el sueño de recoger dinero para comprar unas diez vacas para trabajar en una parcela que tiene la familia.
Con lágrimas que mostraban su profundo dolor el señor Cruz dijo que en vez de ayudar a la familia, como pretendía, su hijo más bien lo que encontró fue la muerte. “Él era mi bordón, no me dejaba solo. Siempre me ayudaba, porque estoy enfermo”, expresó.
Dijo que todavía a eso de las nueve de la noche del sábado, el joven llamó por teléfono a su familia avisándoles que con un amigo le mandaba cien dólares a su esposa y que posiblemente vendría para navidad, pero que si no podía venir le enviaría el dinero a su padre para que se hiciera una operación. También le había prometido a su hermano Alex Ariel que lo ayudaría en su promoción de bachillerato.
Una hora después pereció en el accidente en Costa Rica y con tan mala suerte que el dinero que había enviado también se lo robaron al amigo cuando llegó a Managua.
Cruz Tercero era padre de dos niñas: Anielka de 2 años y Erika de 1 año, ambas están con su esposa Maritza Acuña, que hoy llora la pérdida de su marido.