Hace once años cuando Kevin Gadea fue firmado, los Marineros de Seattle estaban seguros de haber encontrado un prospecto de grandes proyecciones y su desempeño al arranque de su carrera dio fuerza a esa hipótesis. El espigado tirador nacido en Estelí, criado en Matagalpa y radicado en Chinandega, comenzó pisando fuerte los terrenos del beisbol profesional.
Sin embargo, luego vendrían lesiones y una serie de batallas más que pondrían a prueba no solo las habilidades de Gadea, sino también su carácter. Y cuando parecía haber salido con éxito de las dificultades y estando saludable, fue reclutado por Tampa Bay en el draft de la Regla V en 2017 y fue incluido en el roster de 40, listo para debutar en las Mayores.
Pero de nuevo se presentaron lesiones y el aterrizaje en Grandes Ligas fue pospuesto. Lo que nadie imaginó es que ese aplazamiento sería definitivo y Gadea iniciaría un tour por distintos torneos y países hasta venir de vuelta a Nicaragua y enfilarse con los Indígenas de Matagalpa, quienes lo anuncian para su serie del fin de semana contra Boaco en el Pomares.
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Cuando Gadea inició en Venezuela en una liga de novatos en 2013, tuvo 9-1 y 2.65 en 71.1 innings con 48 ponches y 23 boletos. Al año siguiente fue enviado a EE.UU. y apareció la primera lesión. Solo lanzó en tres juegos y terminó con 0-0 y 7.71 en 9.1 episodios. Fue enviado a República Dominicana en 2015 y cerró con 4-4 y 2.25 en 76 entradas.
Para el 2016, fue instalado de nuevo en Estados Unidos y finalizó en Clase A, tras un breve paso por la Liga de Novatos, y acumuló 4-1 y 2.36 con 95 ponches en 68.2 innings. Nunca había lucido tan bien. Su velocidad alcanzó 95 millas y su curva, cambio y cutter, dieron resultado. Incluso, lo contrataron los Tigres de Aragua en Venezuela y tuvo 2-2 y 2.10 en 30 episodios.
Justo ahí lo agarró Tampa Bay y lo incluyó en su roster de 40, pero Gadea pasaría los cuatro años siguientes batallando con lesiones, incluso, se le practicó una cirugía Tommy John y eso extendió la pausa. En 2021 fue firmado por los Yanquis y lo instalaron en AA donde sumó 2-1 y 2.61 en 41 innings con 58 ponches. Y en AAA, tuvo 0-0 y 1.80. Parecía recuperado.
Desde entonces, su caída ha sido dramática. El 2022 lo inició con los Mets en AA y tras sumar 0-2 y 11.74 en 15.1 innings, fue dejado libre. Se unió a los Leones del Caracas en Venezuela y salió rápido con 0-1 y 9.26 en 11.2 episodios. Incluso, se unió a los Leones en Nicaragua y concluyó con 2-3 y 8.78 en 25.2 entradas, antes de quedar en libertad.
Se asegura que está saludable y los Dantos planeaban inscribirlo en el Pomares, pero se les informó que no podían tenerlo porque no cumple con los requisitos de tres años de residir en Managua. Entonces, va con Matagalpa, donde se espera que sea un brazo importante a la par de Wilder Rayo y Starling Orozco, en el plantel de Franklin Sánchez.
¿Qué tan útil será Gadea? Solo con el tiempo lo sabremos, pero es natural esperar algo bueno de un lanzador que incluso trabajó en el Clásico Mundial el año pasado con Nicaragua, pero en este deporte nunca se sabe. Lo que es cierto, es que Gadea ha ido en caída libre. Vamos a ver si se recupera en el Pomares, donde curiosamente hará su debut.