El asesor legal internacional de Nicaragua, Paul Reichler, renunció a su cargo a través de una carta dirigida al dictador Daniel Ortega, a quien le reprocha todos los crímenes y desmanes que ha realizado desde que regresó al poder en 2007. “Mi conciencia moral me exige que debo cortar mis lazos (con Ortega) y negarme a servirle”, le dice.
“La segunda razón por la que le escribo es para dar por terminada mi relación con usted y su gobierno. No sé qué le hizo cambiar, pero Usted ya no es el Daniel Ortega a quien tanto respeté, admiré, quise y serví con orgullo durante tantos años”, le escribió Reichler al dictador.
En la renuncia, Reichler señala a Ortega por el “asesinato” del exguerrillero Hugo Torres. “Me resulta impensable que ese Daniel Ortega hubiera asesinado a Hugo Torres y llevado sádicamente a los otros grandes patriotas, ahora encerrados en sus celdas, al borde del hambre y la muerte”, escribió el abogado internacional.
Esta es la carta que dirigió el asesor legal internacional a Ortega:
Una relación de 40 años
La relación laboral de Reichler con Ortega inició en enero de 1984, cuando el ahora dictador coordinaba la Junta de Gobierno y le pidió al norteamericano que trabajara en el equipo que estaba preparando una demanda contra Estados Unidos, por propiciar una guerra civil en Nicaragua, cuenta Reichler en la carta de renuncia.
Así iniciaría una relación de 40 años que tuvo continuidad en 2007, cuando Ortega regresó al poder.
Bajo anonimato, una fuente confió que Ortega y Rosario Murillo confían en Reichler por su “genio” y “talento” como abogado internacional. Han sido muy cercanos y Reichler y su esposa adoptaron a una niña nicaragüense y le pusieron el nombre de Rosario.
Reproches
Después de ensalzar la figura de Ortega, en su renuncia Reichler le reprocha la represión desatada por el dictador, desde que comenzó a suprimir “tan despiadadamente” el derecho de los nicaragüenses a marchar en las calles y muy especialmente con los asesinatos a partir de abril de 2018.
“Me resulta aún más inconcebible que ese Daniel Ortega hubiera arrestado, confinado en condiciones intolerables y enjuiciado a más de 50 ciudadanos destacados —de la política, los medios de comunicación, las universidades y los negocios— con cargos falsos que no son más que un pretexto para eliminar la disidencia y la oposición”, le escribió Reichler a Ortega.
La desaprobación de Reichler a Ortega pasa también por llamarle a su gobierno “dictadura”, ya que el norteamericano considera que ha habido “elecciones falsas”, el sistema judicial es “corrupto”, y se ha silenciado a la libertad de expresión y a los medios de comunicación independientes.
El abogado internacional también recrimina a Ortega “haber forzado al exilio a sus más ilustres ciudadanos, incluidos Sergio Ramírez, Luis Carrión, Carlos Fernando Chamorro, Edmundo Jarquín, Gioconda Belli, Mónica Baltodano, Julio López Campos y muchos otros héroes sandinistas y no sandinistas, así como miles de nicaragüenses de todas las tendencias políticas cuya libertad ha sido negada o amenazada”.
