Durante la presentación del combate de Saúl “Canelo” Álvarez contra Dmitry Bivol en San Diego, el considerado mejor peleador libra por libra del momento atendió sin problemas a todos los periodistas presentes. Canelo entiende muy bien el negocio debido a que podría poner límites de preguntas o de medios para atender, sin embargo, valora el tiempo de cada uno de los comunicadores en el salón. Parece que el dinero no ha cambiado los valores de Álvarez, quien llegó en un Bugatti azul con negro valorado en más de dos millones de dólares, pero que le abre las puertas de su gimnasio a un pugilista como Rey Martínez, próximo oponente de Chocolatito.
Tan solo hace una semana Martínez arribó al gimnasio de Canelo y Eddy Reynoso para afinar detalles del combate contra el nicaragüense. Para Canelo tener a un monarca como Rey significa el regreso a las raíces, ayudar a pugilistas esforzados y colmados de ambición, pero con dedicación al trabajo. Al preguntarle a Canelo sobre la reyerta fue sincero. “Es una pelea difícil para Martínez que sube de peso, pero creemos en él que es un pegador natural y lo he aconsejado”, explicó la figura mexicana.
Por su parte, Eddy Reynoso, ganador de la distinción de entrenador del año para The Ring Magazine, no ocultó para nada la estrategia de Martínez. “La única manera de ganarle es echándolo para atrás y tirarle golpes. Martínez tiene una pegada respetable y hay que hacerla valer. Creo que irá al choque porque es un nato que le gusta ir hacia adelante atenido a su fuerte pegada y creo que no habrá tiempo de estudiar asaltos. Siempre va hacia adelante y nadie se lo va a cambiar”, señaló el estratega.
En la estancia corta en el gimnasio de Canelo, el retador de Chocolatito mostró determinación tan así que Reynoso cree en él. “Siempre lo apoyamos a los chavos que Martínez que vienen desde abajo. La pelea termina por nocaut. Es muy difícil que llegue hasta el final”, concluyó.