En un juicio a puertas cerradas, celebrado en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), el martes 22 de febrero, la jueza Décimo Tercera de Distrito Penal de Juicios, Ulisa Yahosca Tapia Silva, sentenció a un total de 8 años de cárcel a la exfiscal María del Socorro Oviedo Delgado. El pasado lunes 14 de febrero a Oviedo la declararon culpable de conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional y de ciberdelitos.
Según su abogado defensor, los 8 años de prisión incluyen las penas por los dos delitos. Son 5 años, más la inhabilitación para ejercer cargo público, por el delito de conspiración para cometer menoscabo, y 3 años de prisión por la propagación de noticias falsas.
Según la revista Confidencial, en otro acto también celebrado ayer a puertas cerradas en la DAJ, se leyó la sentencia al banquero Luis Rivas Anduray, a quien le impusieron un total de 13 años de prisión.
El pasado 14 de febrero, el juez Cuarto Distrito Penal de Juicios, Ángel Jeancarlos Fernández González, declaró culpable a Rivas de tres delitos. Un abogado confirmó a LA PRENSA que los delitos que le imputaron son: conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional, portación ilegal de armas de fuego, y fabricación, tráfico y uso de armas restringidas, sustancias o artefactos explosivos.
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Para Oviedo es la segunda condena
Rivas permanece en las celdas del complejo policial conocido como nuevo Chipote desde el 15 de junio pasado y las razones de su encarcelamiento se consideran políticas. Él es parte del grupo de empresarios, estudiantes y dirigentes sociales y políticos capturados entre el 28 de mayo y el 22 de noviembre pasado.
A raíz de su captura, la gerencia del Banpro, que es parte del Grupo Promerica, dijo que confiaba en la calidad moral de su alto ejecutivo, pero desde entonces no han vuelto a pronunciarse sobre el caso, que además es uno de los que se maneja con más secretismo.
Mientras tanto, la abogada de 39 años está en las celdas de la DAJ desde el 29 de julio pasado y también es considerada presa política. Hasta antes de su captura, Oviedo coordinaba el equipo legal de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), además, estaba a cargo de la defensa de varios presos políticos.
Esta actividad la comenzó a realizar desde 2018, luego de renunciar a su cargo de fiscal por no estar de acuerdo con la criminalización de la defensa de los derechos humanos que promovía el Ministerio Público.
Para Oviedo este es su segundo encarcelamiento. En julio de 2019, mientras acompañaba al exreo político Cristian Fajardo a realizar un trámite en la estación policial de Masaya, el teniente Óscar López la manoseó y empujó. Ella se defendió dándole una cachetada, acción por la que fue procesada y condenada. La Fiscalía pidió 4 años de prisión, pero la jueza Nalía Úbeda Obando le impuso un mes de prisión, y luego valiéndose de lo que establece la ley para delitos menores, le suspendió la pena.
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