Países y funcionarios internacionales que defienden la democracia y los derechos humanos se pronunciaron este miércoles 19 de mayo por la cancelación de la legalidad de dos partidos políticos opositores, en medio del proceso electoral que se lleva a cabo en Nicaragua.
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La subsecretaria interina de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental, de Estados Unidos, Julie J. Chung, manifestó este miércoles en su cuenta de Twitter que lo está ocurriendo en Nicaragua no debe ser ignorado por las naciones democráticas.
“Al cancelar arbitrariamente el estatus legal de un partido político de oposición, el Consejo Electoral de Ortega está socavando el derecho de los nicaragüenses a elegir a sus líderes y la credibilidad del proceso electoral. Las naciones democráticas no pueden ignorar lo que está sucediendo en Nicaragua”, expresó.
By arbitrarily canceling the legal status of an opposition political party, Ortega’s Electoral Council is undermining Nicaraguans’ right to choose their leaders and the credibility of the electoral process. Democratic nations cannot ignore what’s happening in Nicaragua.
— Julie Chung (@WHAAsstSecty) May 19, 2021
El defensor internacional de derechos humanos y ex secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Paulo Abrāo, también denunció la injusta cancelación de dos partidos políticos opositores.
“No hay respeto a los derechos humanos en Nicaragua y parece que tampoco elecciones libres. Las decisiones de impedir el PRD de la Coalición Nacional —que apoyó las protestas opositoras de 2018— y el Partido Conservador son arbitrarias e ilegales”, manifestó Abrāo.
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El régimen de Daniel Ortega movió sus hilos en el Consejo Supremo Electoral (CSE) para cancelar la personalidad jurídica del Partido Restauración Democrática (PRD), presidido por Saturnino Cerrato Hodgson. Este miércoles también se oficializó la cancelación para el Partido Conservador (PC) presidido por Alfredo César Aguirre.
Particularmente el PRD era el único partido con legalidad dentro de la plataforma opositora Coalición Nacional (CN) que reúne a más de 10 organizaciones y sectores que adversan al régimen de Ortega.
El CSE es una institución controlada por militantes y personas afines al partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que encabeza Ortega. Es por eso que los sectores opositores no confían en la transparencia de las próximas elecciones del 7 de noviembre, para elegir presidente, vicepresidente, diputados nacionales y ante el Parlamento Centroamericano (Parlacen). Aún así, existen grupos que opinan por participar para denunciar el fraude electoral que se espera.