La oposición de Nicaragua no logró concretar un acuerdo político que los lleve unidos como una alianza electoral oficial en las próximas elecciones generales de noviembre.
Este miércoles fue el único día establecido en el calendario electoral para registrar la constitución de alianzas de partidos políticos ante el Consejo Supremo Electoral (CSE).
Hasta el mediodía de ayer había esperanza de que el partido Ciudadanos por la Libertad (CxL) y Partido Restauración Democrática (PRD) —organizaciones políticas con personalidad jurídica que encabezan dos bloques opositores diferentes—, pudieran lograr un acuerdo, pero no fue así.
A las 2:30 p.m. la presidenta y representante legal del partido CxL, Kitty Monterrey, registró la denominada Alianza Ciudadanos por la Libertad únicamente con el Partido Movimiento Unidad Costeña (Pamuc), una organización regional con la que tenían un acuerdo previo desde febrero pasado, descartando finalmente al PRD.
Ahora, los representantes de ambos partidos se culpan de no aceptar la propuesta del otro.
Monterrey dijo al salir del CSE que esperaron la respuesta de Saturnino Cerrato, presidente del PRD, hasta después de la 1:00 p.m. Mientras que Cerrato manifestó que no se presentó al emplazamiento de CxL porque estos solo querían obligarlos a firmar el acuerdo sin negociación previa.
“Nosotros queríamos sentarnos con ellos para negociar la casilla, la representación legal, las candidaturas, esas cosas que no son de estar frente a los periodistas, sino de sentarse, platicar de ventajas, desventajas, pros y contras, entonces por eso nosotros no fuimos al llamado insistente que ellos hicieron, porque esa no es la manera de negociar entre dos partidos políticos o dos instituciones, entonces no se logró, porque nosotros no íbamos simplemente a firmar”, dijo Cerrato a LA PRENSA vía telefónica.
Aunque el PRD no se registró en una alianza electoral, puede seguir compitiendo solo como partido político. En ese sentido, Cerrato dijo que el próximo plazo importante en el calendario electoral es la presentación y registro provisional de los candidatos, del 28 de julio al 2 de agosto.
“Ya no tenemos que hacer una alianza de derecho, sino una alianza de hecho, entonces hacemos el documento legal de la alianza de hecho y presentamos a los candidatos”, dijo el presidente del PRD.
Por su parte, los miembros de la plataforma Alianza Ciudadana (AC), que lidera CxL, insistieron en que la unidad con otros sectores y organizaciones opositoras todavía se puede lograr de hecho.
“Vamos a continuar integrando a todos aquellos sectores que sean necesarios, que tengan la voluntad de integrarse en esta alianza. Tenemos mucho tiempo para conversar con los otros sectores, con las otras organizaciones, lo de hoy (ayer) era entre partidos políticos para constituir una alianza, con el resto de las organizaciones seguiremos disponiendo del tiempo que sea necesario para cumplir con ese objetivo”, expresó el vicepresidente de CxL, Oscar Sobalvarro, minutos antes de dirigirse a inscribir la alianza ante el CSE.
En teoría, la unidad entre el PRD y CxL no se concretó por la falta de acuerdo en el tema de la representación legal de la alianza. El PRD propuso un representante legal de la alianza de común acuerdo y el partido CxL insistió en que no iban a ceder la representación legal a otro que no fuera Kitty Monterrey. También se generó un dilema en la cuota de diputados y el proceso de definición del candidato presidencial único de la oposición. PRD pedía el 50 por ciento de diputados para cada grupo, lo que fue tajantemente rechazado por CxL.
Los críticos valoran que sin unidad entre las mayores fuerzas opositoras de Nicaragua —que son los bloques Alianza Ciudadana (AC), liderado por CxL, y la Coalición Nacional (CN), que encabeza el PRD—, el voto opositor se dividirá el día de las elecciones, lo que solo le conviene al partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), que lidera Daniel Ortega.
Las conversaciones entre el PRD y CxL fueron mediadas por el reconocido deportista nicaragüense y uno de los voceros de la Comisión de Buena Voluntad (CBV), Dennis Martínez, quien hasta el último día insistió en la importancia de la unidad e incluso dijo que se trataba de un asunto de vida o muerte en Nicaragua.
Demandan de unidad hasta último momento
Un grupo de familiares de presos políticos y de víctimas de la represión del régimen de Daniel Ortega demandaron hasta el último momento la unidad entre la Alianza Ciudadana (AC) y la Coalición Nacional (CN).
Los demandantes se presentaron al lobby del hotel donde se encontraban reunidos los miembros de la AC, que es el bloque encabezado por el partido Ciudadanos por la Libertad (CxL), y quisieron entregar una carta al grupo político para exigirle la unidad.
“Piensen en la unidad, porque si no el pueblo se encargará de juzgarlos. Somos personas con esperanza las que estamos necesitando unidad”, dijo Grette Gómez, mamá de un excarcelado político.
Al principio, a los familiares se les impidió la entrada al local, sin embargo luego miembros de la AC salieron al lobby para recibir el documento.