El empaque para los granos básicos, los envases utilizados para productos de consumo, las bolsas plásticas y las pajillas, entre otros, son algunos de los rubros que podrían escasearse y con ello provocar un caos económico debido a la utilidad de los mismos, advirtió el sábado la Gremial del Plástico. La causa: un efecto directo del mercado internacional.
Además de los más de 3 mil empleos directos y más de 20 mil empleos indirectos que están en riesgo, la situación amenaza la comercialización de productos agropecuarios que son empacados en el país, al sector que vende los productos plásticos y al comercio minorista que utiliza el plástico recurrentemente, es el caso de las bolsas.
Eddy Madrigal, vicepresidente de la Gremial, indicó que las 14 empresas que la conforman, les ha tocado lidiar con el aumento excesivo de costos lo que les ha obligado a reestructurar procesos de producción, recortar la fabricación de algunos productos y enviar a vacaciones a sus colaboradores.
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Además de los efectos en el comercio minorista mediante la oferta de bolsas plásticas, la situación alcanza ribetes mas grandes. “El problema es que en momento de escasez no tendremos empaques que ofrecerle a los ingenios azucareros, a las empresas que venden pollo, arroz, carne, café… ese es el nivel de impacto en una crisis de esta industria”, explicó.
Las previsiones apuntan a un alza de hasta el 25 por ciento en los precios, de acuerdo a las estimaciones de la Cámara de Comercio y Servicios de Nicaragua (CCSN), “estimamos que hay un incremento entre un 15 y 25 por ciento, por lo que se hace necesario tener medidas económicas o políticas públicas para ser competitivos y buscar cómo crear oportunidades locales para paliar dicha situación”, comento Carmen Hilleprandt, presidenta de este gremio.
El plástico es una sustancia lograda a raíz de procesos químicos siendo una de sus principales materias primas la resina de polímeros lograda del petróleo y es de ahí que el precio de éste incide directamente. En otras palabras, el plástico se logra mediante el proceso llamado “polimerización” a través de uno de los gases del petróleo: el etileno, el mismo que se usa en la calefacción.
Debido a la situación de emergencia que vive esta industria, la Cámara de Industrias de Nicaragua (Cadin), emitió un comunicado donde prevén el alza de los insumos y el desabastecimiento de productos.
Madrigal señaló que la mayor parte de la industria ha hecho grandes esfuerzos para evitar el desabastecimiento del mercado pese a enfrentar relevantes aumentos en la inyección de capital propio para evitar los cierres, “la mayor parte de la industria ha hecho esfuerzos enormes pues han necesitado incrementar casi tres veces su capital de trabajo para sostener sus niveles de producción, algunas no lo han logrado”.
A manera de ejemplo dijo que una industria que antes gastaba 100 mil de dólares en materia prima, ahora debe invertir 300 mil y esto no es sostenible.
“Todos los productos plásticos a base de polímeros van a tener un incremento de precios”, aseguró. Las previsiones de normalización son hasta fin de año.
Indicó que aún no tienen previsto recortes de personal.
¿Y el reciclaje?
A pesar de que la cultura de reciclaje en Nicaragua aún no se ha enraizado, hay un sector que lo mantiene como fuente de ingresos, pero según la industria de plástico, no todo sirve para el portafolio de productos que ofrecen.
Sin embargo, hay rubros como el plástico negro y las bolsas para basura, que tiene el material reciclado como materia prima, por lo que sería un producto que no se vería tan afectado, explicó Madrigal.
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No obstante la industria del reciclaje también podría verse afectada una vez que se haga efectiva la escasez de plástico.
La industria del plástico nicaragüense fabrica principalmente bolsas plásticas para el segmento de consumo, empaques para la industria de alimentos, envases y recipientes, sillas y mesas, pajillas y productos para el sector agrícola.
Efecto pandemia
Para el presidente de la Cámara de Industrias de Nicaragua (Cadin), Marcos Pierson, esta crisis se originó a raíz de la pandemia por Covid-19 por el exceso de demanda, combinado con que la producción se redujo a causa de la misma situación sanitaria.
“Esto provocó estrés en la industria”, apuntó. A esto le agrega el asunto del transporte, que a causa de la pandemia tuvo efectos adversos, los puertos funcionan a medio gas. “Los contenedores están pasando más tiempo en los puertos esperando su traslado en los barcos o para que los vacíen y esto a provocado escasez de contenedores”.
El efecto de esto es el incremento en el costo del transporte marítimo, que dependiendo de la ruta ha sido el doble de lo que comúnmente cobraban.
Texas congelado
Siendo el petróleo un insumo imprescindible para la industria del plástico, la tormenta invernal que afectó severamente al estado de Texas hace unas semanas, uno de los mayores productores del oro negro en Estados Unidos y abastecedor de los países latinoamericanos, caló severamente en este sector.
“Esto redujo la producción de la materia prima del plástico y duplicó el precio”, indicó Pierson, quien estimó que la situación afecta a toda la región centroamericana.
Nicaragua menos competitiva
La discrecionalidad en el cobro de aranceles e impuestos por parte del régimen de Daniel Ortega pone en más problemas al sector.
El presidente de Cadin señaló que “en Nicaragua tenemos un caso más complicado porque estamos trabajando con un nivel de competitividad en desventaja respecto a los otros países de Centroamérica, tenemos una carga impositiva más alta”.
Pierson señaló que las aduanas no estaban reconociendo el precio real de las facturas de las importaciones y por el contrario le hacen ajustes incrementales, “las ajustaban hacia arriba, cobraban más impuestos” a pesar de que meses atrás el precio internacional del petróleo se desplomó y por ende en el de las materias primas derivadas.
“Eso era completamente discrecional ahora se da menos porque los precios (del petróleo) están más altos, pero cuando la industria pudo haber tenido un respiro, este no lo percibieron porque las aduanas les subía al valor de las facturas”, apuntó.