A diferencia de los últimos tres años, este 2021 arrancó con una mayor circulación de dinero en el mercado, que se acentuó principalmente en diciembre pasado, al alcanzar un récord de 28,053.3 millones de córdobas en numerario, según datos del Banco Central de Nicaragua. En el primer de este año hubo un leve descenso, pero aún la cantidad de dinero en manos de los nicaragüenses sigue siendo de la más alta no registrada en años.
Según datos oficiales, en enero en numerario- que es la cantidad de dinero, que incluye monedas, en manos de los nicaragüenses- se registró 26,962.4 millones de córdobas, que comparado con igual mes del año pasado, hay un aumento de casi 7,000 millones de córdobas. En el primer mes del año pasado este saldo ascendió a 20,167.6 millones de córdobas.
Este aumento de enero respecto a igual mes del año pasado, equivale a una expansión de 33 por ciento, lo que en teoría debería ayudar a las actividades económicas, pero dependerá del nivel de certidumbre que logren recobrar los nicaragüenses en un año electoral. Entre más incertidumbre hay, menor es el apetito de los consumidores.
A raíz de la crisis sociopolítica hubo una fuerte contracción en la circulación de dinero, lo cual se mantuvo hasta cerrar el 2019. Para el 2020 el panorama comenzó a cambiar y pese a la pandemia se mantuvo estable, hasta que en noviembre y diciembre se observó un aumento significativo en el circulante, coincidiendo con la llegada de más dinero desde el exterior a través de préstamos externos, una gran parte aún permanece guardado en la bóveda del Banco Central de Nicaragua.
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El economista Maykel Marenco reconoció que el régimen de Daniel Ortega ha sido muy cuidadoso con la política monetaria tomando en cuenta que en la década de los ochenta aumentó el circulante y eso solo provocó un incremento desbordado de la inflación.
Marenco señala que en parte este aumento de circulante se pudo originar de la captación de recursos frescos externos por parte del régimen a finales del año pasado e inicios de este año. “Aquí sería necesario saber cuántos de esos recursos fueron inyectados en la economía, porque si esos recursos ya están en la economía, por supuesto esto se traduce en una especie de política monetaria activa”, dijo Marenco.
Lo que sí se sabe hasta ahora es que el Gobierno va a incorporar en el Presupuesto General de la República unos 20 mil millones de córdobas, equivalente a un aumento del 25 por ciento respecto a su gasto público aprobado el año pasado, lo que estimulará la circulación de más dinero en el mercado nacional.
En enero el Gobierno tenía depositado en el Banco Central 26,599.6 millones de córdobas, por encima de los 16,245.7 millones de córdobas acumulados en igual del año pasado. Eso equivale a un incremento en el periodo de 64 por ciento, un crecimiento no visto en la última década. Gran parte de estos recursos aún están pendiente de entrar a la economía mediante la ejecución de proyectos, lo que afectará el numerario.
Aumenta base monetaria
El informe monetario de enero 2021 del BCN detalla que la base monetaria —incluye el numerario y las reservas de los bancos comerciales en el Banco Central— registró un saldo de 40,062.6 millones de córdobas, 20.3 por ciento más con respecto a los últimos 12 meses. Este nivel no se había registrado en Nicaragua.
Asimismo, el BCN indica que el comportamiento de la base monetaria estuvo determinado principalmente por las operaciones del Gobierno Central (2,217.5 millones de córdobas) y la colocación neta de los valores del BCN, los cuales se concentraron principalmente en Letras a plazo de un día.
Mejora el crédito incide
Pero además la mejora en la circulación de dinero respecto a todo el 2020 coincidió con un repunte en la cartera de crédito de los bancos comerciales en enero, lo que también suele incidir en el mercado interno.
Según datos de la Superintendencia de Bancos y Otras Instituciones Financieras (Siboif), en enero la banca entregó 14 millones de dólares en su quinto mes consecutivo de recuperación de los préstamos, luego de fuertes contracciones desde el 2018 tras el estallido de la crisis sociopolítica.
Además la circulación de dinero está coincidiendo con una mejora en la base de contribuyentes del Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS), que en enero sumó 13,545 afiliados con respecto a diciembre de 2020, cuando la institución cerró con 723,206 asegurados, según cifras del BCN.
Ese aumento de afiliados también debería abonar al circulante y al crecimiento del consumo interno deprimido desde hace tres años. Sin embargo, Marenco advierte que ese incremento en el circulante respecto a lo registrado en el 2020 no necesariamente podría incidir en el consumo, puesto que hay momentos en que la población por falta de certidumbre, aunque tiene dinero decide no gastar.
Otros indicadores
El reporte del Banco Central de Nicaragua indica que en cuanto al agregado monetario, este este tuvo un crecimiento positivo debido al numerario. “En enero todos los agregados monetarios continuaron mostrando un crecimiento interanual positivo. Así, la tasa de crecimiento interanual del agregado monetario fue 23.2 por ciento, explicado principalmente por el crecimiento del numerario”, detalla.
En cuanto al encaje legal, el comportamiento de la liquidez fue consistente con el sobrecumplimiento de los requerimientos de encaje legal en ambas monedas. Con relación a la medición catorcenal, la tasa efectiva de fin de mes se ubicó en 16.3 por ciento en Moneda Nacional y 16.7 por ciento en Moneda Extranjera. El exceso de encaje en MN fue de 805.6 millones de córdobas, mientras que en ME el excedente ascendió a 51.9 millones de dólares.
En tanto, las Reservas Internacionales Brutas (RIB) se situaron en 3,332.8 millones de dólares, es decir 120.9 millones de dólares más que al cierre de 2020, “nivel que fue consistente con una cobertura de RIB a base monetaria de 2.90 veces. Este indicador de cobertura se ubica en niveles adecuados, lo que sustenta la estabilidad del régimen cambiario vigente”.
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