Rivas amanece inundado, mientras huracán Iota avanza por el territorio nacional

El paso del huracán Iota por territorio nacional —que entró en categoría 4 y se degradó hasta tormenta tropical la tarde de este martes— ha provocado serias afectaciones en el departamento de Rivas y sus municipios como Tola y Potosí, donde las viviendas amanecieron totalmente inundadas y los ríos desbordados tras las fuertes lluvias registradas desde la madrugada hoy.

Uno de los barrios afectados fue Los Pinos. En un recorrido que realizó LA PRENSA se pudo constatar que las fuertes precipitaciones provocaron que las principales calles se convirtieran en caudalosos ríos, las personas caminan con el agua hasta el nivel de la cintura y los vehículos se encuentran sumergidos en la corriente.

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Otra de las zonas afectadas fue el barrio Popoyuapa, donde se reportan unas 30 viviendas totalmente anegadas. «Mi casita, que le llaman la Quinta del Triángulo, el agua se me metió como en 4 o 5 pulgadas, a pesar que está en lo alto. Lo que pasa es que no hay desaguaderos en este barrio», manifestó Miguel Ortiz, habitante de la zona.

Asimismo se reporta la crecida del río Ochomogo, que está provocando inundaciones en diferentes barrios de la ciudad. Hasta ahora se desconoce la cantidad de familias afectadas tras el paso de este fenómeno natural.

Evacuaciones en Potosí

Las familias de Potosí, Rivas, fueron evacuadas hacia los albergues habilitados para la emergencia. Autoridades señalaron que unas 120 familias están en zona de riesgo por la crecida del río Ochomogo.

En el municipio de Potosí las corrientes del río Pompuá alcanzaron el nivel del puente provocando serias inundaciones en las viviendas aledañas. Esta misma situación se presenta en Buenos Aires, donde las fuertes corrientes inundaron las iglesias y colegios.

Por su parte, las autoridades locales informaron que hasta el momento han evacuado a unas 922 personas hacia «casas solidarias», principalmente en el municipio de Tola, donde se registran las crecidas de los ríos. «De los 104 albergues que se tienen en uso, hay 13 albergando a más de 300 personas», informó el oficialista El 19 Digital.

El director del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), Guillermo González, detalló la mañana de este martes que las afectaciones en Rivas se iniciaron a mostrar a eso de las tres de la madrugada.

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«Aquí lo importante también es que ya comenzamos a tener afectaciones en el departamento de Rivas, nos informaron como a las 3 y media de la mañana que inclusive hay algunas zonas de la carretera en la entrada a Tola que ya comienzan a mostrar cierto nivel de inundación, se han hecho movilizaciones preventivas de las poblaciones para evitar los riesgos. En Ometepe las lluvias han sido leves, sin embargo, se está muy atento por aquello de que estamos muy pendientes de los deslizamientos»,  informó González en los medios oficialistas.

Debido a las inundaciones las autoridades locales también procedieron a realizar las labores de evacuación de varias familias que habitan en la ribera del río Ochomogo ya que el nivel del agua comenzó a crecer y amenaza con desbordarse.

Habilitan parroquia como albergue

Ante la emergencia desatada en Rivas, como consecuencia de la ahora tormenta tropical Iota, la parroquia San Pedro Apóstol de esa ciudad abrió las puertas del templo para alojar a las familias afectadas por el fenómeno natural, que desde la madrugada de este martes inundó el departamento y desbordó los ríos.

«Se les comunica que las puertas del templo parroquial estarán abiertas para alojar a todas las personas que están siendo afectadas por inundaciones que ha provocado el huracán Iota para salvaguardar sus vidas, no duden en ir. Sigamos orando para que este fenómeno se vaya disipando y no siga causando más desastres», manifestaron los líderes religiosos a través de Facebook.

Familias afectadas

En horas de la tarde de este martes la lluvia disminuyó en la ciudad de los mangos, pero la afectación en las viviendas y calles es visible en su casco urbano y zona rural, con muros caídos, ríos desbordados, casas con la seña de la altura alcanzada por la corriente o todavía algunas inundadas. Las llamadas bandas de Iota se hicieron sentir en este departamento del Pacífico Sur de Nicaragua.

En pleno centro de la ciudad el agua botó una pared y anegó la casa de María de los Angeles Espinoza, quien resintió los embates del fenómeno natural. «15 años tengo de vivir aquí, pero hasta ahora vivo esto, porque en otros años me la pasé en Costa Rica trabajando no me di cuenta, pero a los pobres perros los hallé inundados y remojado adentro (de la casa)», relató Espinoza, habitante de la entrada a la carrilera, kilómetro 110 de la carretera Panamericana Sur.

Mientras que algunos puntos de la carretera a Tola estuvieron obstruidos por lodo y ramas secas que fueron arrastradas por las corrientes. En villa Gaspar García, unos kilómetros antes del poblado, dos ríos afectaron a unas 50 casas. Una de ellas fue la de Emiliano Bello.

«Aquí se nos juntan dos ríos, el de Tola y el de Chacalapa y cuando colapsan los dos comienzan a juntarse. Aquí no hubo pase durante toda la mañana, y nosotros cuando lo miramos subiendo (el río) nos movilizamos. En nuestra familia hubo pérdidas de ropa, camas y granos básicos que uno mantiene, la cosecha en el campo también se perdió», manifestó Emiliano Bello, habitante de villa Gaspar García, en Tola.