La Comisión del Beisbol pasó por alto la enfermedad de los jugadores del San Fernando y mantuvo la serie contra el Bóer este sábado y domingo en el Campeonato Nacional. Los jugadores de Masaya presentaron cansancio, gripe y dolores en el cuerpo y por esa razón algunos jugadores y árbitros decidieron jugar con mascarillas temorosos al contagios del Covid-19.
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En estos tiempo de la pandemia, los malestares de los jugadores de Masaya crearon cierta preocupación entre otros sus miembros y el Bóer,por lo que algunos integrantes de ambos equipos decidieron tomar sus propias medidas para protegerse, algo que debió hacer la máxima autoridad del beisbol.
La única medida de la Comisión ante esta realidad fue retrasar el inicio de la serie prevista para arrancar el viernes. Los jugadores del San Fernando no querían disputar este encuentro, no por la situación de sus compañeros, sino por la situación general del país casi a dario se miran los entierros express nocturnos.
Sin todos los jugadores disponibles, el San Fernando utilizó el sábado a tres lanzadores en otras posiciones: tercera base, campo corto y jardín izquierdo, todos posiciones claves. El deporte en Nicaragua se mantiene activo a pesar de la pandemia del Covid-19. El futbol terminó la temporada hace una semana y el beisbol apenas está a la mitad de la segunda vuelta.