Un grupo de legisladores estadounidenses (senadores y representantes) enviaron una carta al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, en la que solicitan que el Consejo Permanente de esa organización reconozca públicamente el informe presentado recientemente por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el cual revela graves violaciones a los derechos humanos en Nicaragua, que podrían constituir crímenes de lesa humanidad.
“Solicitamos respetuosamente al Consejo Permanente de la OEA trabaje con los estados miembros de ese organismo para reconocer públicamente las recomendaciones incluidas en el informe de la GIEI, e instar al gobierno de Nicaragua el cese de sus ataques contra la sociedad civil y los medios de comunicación independientes.
Los legisladores hacen alusión a que el informe del GIEI examinó más de 100 casos de ejecuciones extrajudiciales, detenciones arbitrarias y tratos crueles o degradantes infligidas por el régimen contra manifestantes antigubernamentales, durante las protestas generalizadas entre abril y mayo.
“Mientras el gobierno de Ortega continúa su campaña de abusos contra los derechos humanos, la comunidad internacional tiene la responsabilidad de ayudar a los nicaragüenses a defender la justicia y definir un camino para restaurar la institucionalidad democrática del país”, expresa la carta al secretario Almagro.
Igualmente señalan que es imperativo que la comunidad internacional trabaje para garantizar la responsabilidad de agentes de seguridad del Gobierno involucrados en ejecuciones extrajudiciales y detenciones arbitrarias contra opositores.
En relación a las detenciones, los legisladores citan la serie de redadas realizadas en las últimas semanas por la Policía Orteguista (PO) y el saqueo a oficinas de organismos de la sociedad civil en Nicaragua. “A las organizaciones de la sociedad civil los despojaron de su derecho a operar legalmente”, refiere la misiva.
“Las fuerzas policiales de Nicaragua allanaron las oficinas de las principales organizaciones de la sociedad civil, incluyendo al Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh); el Centro de Investigación de la Comunicación (Cinco), Hagamos Democracia, y el Instituto de Estudios Estratégicos y Políticas Públicas (IEEPP), y los despojó de su derecho a operar legalmente”, indica la misiva.
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En esa misma línea, hace alusión que la PO también allanó y confiscó los principales medios de comunicación independientes, señalando el caso de Confidencial. La dictadura también confiscó el canal 100% Noticias y mantiene presos a su director y a la jefa de prensa, Miguel Mora y Lucia Pineda Ubau, respectivamente.
El informe del GIEI es presentado la mañana de este jueves en el Consejo Permanente de la OEA, durante una sesión extraordinaria que aborda por séptima vez la crisis sociopolítica en Nicaragua.
La carta es firmada por los senadores Dick Durbin, Ben Cardin, Ted Cruz, Marco Rubio y el representante Albio Sires.
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El GIEI fue expulsado de Nicaragua por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo el pasado 19 de diciembre, horas antes que ese organismo presentara el informe sobre las investigaciones realizadas en el país sobre la violencia registrada durante las protestas en el periodo 18 de abril al 30 de mayo.