El Real Estelí y el Managua FC se mostraron superior al Juventus y Diriangén. Los norteños no sellaron por completo su pase a la final por dejadez. Tuvieron las opciones claras pero fallaron en la definición y en medio de lo dormido que se portaron, los Pibes lograron salir con vida en casa con un gol faltando seis minutos del final de Nasser Valverde. Sin embargo, quedó claro que la tropa de Fernando Araújo mueve el balón y los hilos del encuentro a su antojo.
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Roberto Chanampe, el técnico argentino del Juventus, aseguró “que no tenemos nada que perder”. Si se toma literalmente están en tiempo extra. Ese lugar era del Walter Ferretti, pero los Policías creyeron haber ganado el encuentro sin jugarlo y se llevaron la sorpresa al ser vencidos 2-1 en el repechaje. El problema de los Pibes es la escasez de figuras, esos jugadores primordiales que hagan la diferencia en un partido de clasificación. Hasta el momento han estado viviendo de pequeñas hazañas, pero contra conjuntos llenos de colmillos como el Real Estelí no basta. Este sábado en el Estadio Independencia (7:00 p.m.) todo está preparado para que el trabuco norteño ratifique su boleto.
En el caso del Managua FC, curiosamente fueron el equipo más temido de la temporada regular. Perdieron dos veces y una fue ante el Diriangén. Resulta que el Managua es un depredador olfateando a su presa en la ofensiva. En Diriamba Lucas Dos Santos y Edward Morillo causaron desequilibro todo el tiempo. Los Leones llegaban como si eran inquilinos de la portería de Brandon Mayorga, pero atrás un total coladero. La tropa de Mauricio Cruz no hizo mucho para que Jorge García abriera el marcador, solamente necesitaron una oportunidad, luego penetraron con una facilidad la defensa en reiteradas ocasiones a pesar de carecer de la pelota.
Este domingo (6:00 p.m.) en el Estadio Nacional el Managua buscará como imponerse, pero Diriangén no necesita de gesta para ganar, solo que sus delanteros lleguen afinados porque oportunidades siempre tendrán: esa defensa de Managua es un agujero negro. No obstante, esa vocación ofensiva del Managua le dan la cara de finalista, la misma que posee el Real Estelí.