Pese a la prohibición de la Policía Orteguista (PO), la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB) insistirá en solicitar permiso para poder realizar marcha en Managua en los próximos días. La UNAB pospuso la manifestación que tenían planeada para este domingo por la seguridad de los protestantes luego de que este viernes la PO negara el permiso, argumentando que la marcha tenía propósitos vandálicos y terroristas, según el comunicado de la Policía de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Los miembros de la Unidad aseguran que no se trata de una cancelación, sino que más bien de una postergación.
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“Convocamos a expresarnos desde nuestros espacios contra la violencia, por la libertad de las presas y presos políticos, por una Nicaragua en libertad y con justicia. Estamos unidos y unidas, decididos a reconquistar nuestras libertades. No necesitamos permiso para eso”, asegura la UNAB a través de un comunicado.
Aseguraron, además, que esta semana enviarán otra carta a la Policía para solicitar el permiso y poder realizar la marcha.
La fecha para dicha actividad aún no la han establecido.
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La UNAB y los grupos de mujeres marcharían este domingo por el Día Internacional Contra la Violencia hacia la Mujer y para exigir la liberación de los presos políticos del régimen que lideran los dictadores, Daniel Ortega y Rosario Murillo, en el poder desde el 2007.
“Para nosotras la respuesta del régimen es de miedo, es de que nos tienen miedo porque no tenemos miedo”, dijo Ana Quirós, integrante del Movimiento Autónomo de Mujeres, durante una conferencia de prensa ofrecida este sábado en un hotel capitalino.
Rechazaron de manera rotunda la resolución emitida por la Policía donde asegura que miembros de la UNAB participaron en un fallido intento de golpe de Estado.
Desmienten argumento de Policía Orteguista
“Es absolutamente falso que la marcha tuviera como propósito promover ‘actos vandálicos’ y de terrorismo”, expresa el comunicado de la UNAB, que aglutina a organizaciones políticas y de la sociedad civil.
Ana Quirós recordó que el informe del Alto Comisionado de las Naciones Unidas fue claro al afirmar que en Nicaragua no hubo intento de golpe de Estado sino que se trató de una masacre gubernamental contra la ciudadanía que protesto cívicamente pidiendo la salida de la dictadura Ortega-Murillo.
“La carta que se entregó a la Policía claramente dice que se trata de una marcha en el contexto de la conmemoración del Día Internacional de la Lucha contra la Violencia hacia las Mujeres establecida por Naciones Unidas y para pedir la libertad de las presas y presos políticos”, expresó por su parte Juanita Jiménez, quien sostiene que la prohibición dictatorial es una estrategia de la Policía Orteguista y la dictadura que encabezan Daniel Ortega y su pareja Rosario Murillo Zambrana.
Policía no puede abolir la Constitución
La organización aseguró que para esta semana notificarán nuevamente a la Policía para realizar marcha e insistieron que negar una marcha es carente de toda legalidad, porque viola el marco constitucional que claramente expresa que los ciudadanos tienen derecho a manifestarse pacíficamente.
“Es equivocado sostener que se requiere personalidad jurídica para ejercer el derecho a la manifestación pacífica. Este derecho lo tienen los ciudadanos y ciudadanas de conformidad con el Artículo 54 de la Constitución Política de la República”, dijo Dolores Blandino, al dar lectura al comunicado de la UNAG que rechaza los argumentos policiales para prohibir la marcha.
“Convocamos a expresarnos desde nuestros espacios contra la violencia, por la libertad de las presas y presos políticos, por una Nicaragua en libertad y con justicia. Estamos unidos y unidas, decididos a reconquistar nuestras libertades. No necesitamos permiso para eso”, exhortó el comunicado de la Unidad Nacional Azul y Blanco.
Lamenta prohibición
El arzobispo de Managua, cardenal Leopoldo Brenes, lamentó la decisión policial de prohibir la marcha programada para este domingo.
“Verdaderamente para mí es triste que no se haya podido conceder el permiso. Yo verdaderamente esperaba que se diera el permiso. Ojalá que esto no traiga más tensiones a la población que desea manifestarse de manera cívica”, opinó Brenes, también presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN).