Gonzalo Koncke, jefe del gabinete del secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, expresó este viernes que confían en que el Gobierno de Nicaragua acepte e implemente las recomendaciones de la reciente resolución del Consejo Permanente del organismo.
Esas recomendaciones incluyen el desarme de los grupos paramilitares, que operan contra la población, y las reformas electorales para un adelanto de las elecciones, porque de no hacerlo, la OEA teme que la crisis empeore a “un escenario que hace inviable la convivencia de los nicaragüenses”.
Según organismos de derechos humanos locales, más de 350 personas han muerto, miles han resultado heridos y cientos de desaparecidos y detenidos ilegalmente en tres meses de protestas pacíficas que han sido reprimidas por el gobierno.
El escenario descrito por la OEA es “demasiado complicado”, si Ortega no para la represión, debido a que, por el promedio de asesinatos en la ola de represión gubernamental, para el fin del año “estaremos hablando de cerca de 800 muertos, tal vez más”.
Koncke brindó una amplia entrevista con La Voz de América, de Estados Unidos y explicó que la resolución adoptada por 21 estados de los 34 miembros de la OEA el miércoles pasado, en la que se condenó al gobierno de Daniel Ortega por la represión contra la población civil, fue la respuesta de la comunidad interamericana ante la situación “trágica” por “un número de muertos realmente escalofriantes”.
“La adopción de la resolución es de gran trascendencia (porque) establece una serie de pautas, que tienen que ver con el cese de la represión, con el cese de violencia, con la condena a las actividades represivas, con el hecho de alentar el trabajo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, con el hecho de apostar al trabajo por un calendario electoral que se enmarca en los principios interamericanos”, afirmó Koncke.
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La mayoría de Estados latinoamericanos condenaron el actuar represivo del gobierno de Ortega, que usa para ello a la Policía y grupos paramilitares contra la población que exige la renuncia de Ortega y de su esposa y vicepresidenta Rosario Murillo, además del adelanto de las elecciones.
Gonzalo Koncke, jefe de Gabinete de #OEA, en entrevista con @VOANoticias: "Los caminos para encontrar soluciones democráticas en #Nicaragua están marcados: Paz (cese represión y violencia), justicia (buscar la verdad) y elecciones". #OEAenNicaragua https://t.co/OyDwxBTgST
— OEA (@OEA_oficial) July 20, 2018
El calendario de reformas electorales propuesto por la secretaría general de la OEA incluye también comicios a más tardar en agosto de 2019. Ortega lleva en el poder desde 2007, se ha reelecto desde entonces dos veces de forma consecutiva, la primera violando la prohibición de la Constitución, la que sorteó con una sentencia judicial de magistrados de su partido en 2010, pero también mediante fraudes electorales, según grupos políticos y organismos de observación nacionales.
El actual período de Ortega concluiría en enero de 2022, por lo que los comicios deberían realizarse en noviembre de 2021, pero la población demanda se celebren comicios pronto tras la masacre.
Koncke dijo que luego de la resolución de la OEA corresponde trabajar para que el Gobierno nicaragüense implemente las ocho recomendaciones hechas, siendo la detención de la represión y violencia y el desmantelamiento de los grupos paramilitares de forma urgente. Para ello reiteró que la OEA propondrá un plan, tal como dijo en la sesión del consejo permanente en que se condenó al gobierno de Ortega. No ahondó tampoco en detalles.
“Siempre hay que conservar la expectativa de obtener una solución democrática y de materia de promoción y protección de los derechos humanos, que sería lo racional y lo deseable para los nicaragüenses y para la comunidad interamericana”, insistió Koncke.
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Lo positivo para la Secretaría General radica en que el ejecutivo nicaragüense aceptó la creación y presencia en el país del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, (GIEI) para que se esclarezcan los crímenes, así como el Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (Meseni), que son parte de las 15 recomendaciones de la CIDH.
“Entendemos que los caminos para encontrar las soluciones democráticas en Nicaragua están marcados. Tiene que ver con lo que dijo el propio secretario general, Almagro, al principio de esta crisis y, aún desde antes, tienen que ver con paz, justicia y democracia. Paz a través del cese de la violencia y de la represión, justicia con el trabajo del GIEI y del Meseni, (y) democracia con algo que el secretario Almagro mencionó hace mucho tiempo (y es) la posibilidad de acordar elecciones anticipadas”, afirmó Koncke.
“Cuando las situaciones se polarizan de este modo la única forma de genuinamente bajar la tensión es reconducir los procesos de expresión popular a través de la legitimación que solo el voto permite. La expresión soberana en las urnas es la forma de devolver al pueblo que le pertenece, el poder de decisión”, insistió.
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Proyección macabra: Más de 800 muertes a final del año
La vía democrática para la Secretaría General de la OEA pasa porque el ejecutivo de Ortega “escuche” . “El otro escenario es demasiado dramático. Es un escenario que hace inviable la convivencia de nicaragüenses, es un escenario de muerte, destrucción y dolor. Tenemos del 18 de abril a la fecha más de 300 familias que han perdido seres queridos, eso no puede seguir pasando. Llegó la hora de la solución para Nicaragua”, aseguró el jefe del gabinete del secretario general Almagro.
Retomar Diálogo “de buena fe”
Por ello, es que se urgió a que Gobierno y la Alianza por la Justicia y la Democracia, retomen el Diálogo Nacional a fin de alcanzarse soluciones a la grave crisis sociopolítica.
“Volver a sentarse en esa mesa, volver a hablar, acordar de buena fe, encontrar un camino democrático que necesariamente tiene que pasar por la expresión popular y eso tiene que ver con elecciones, con tiempos de elecciones. Y por su puesto con el cese de la represión, del desmantelamiento de los grupos armados irregulares, el cumplimiento de las recomendaciones de la CIDH”, reafirmó Koncke.