Camionetas doble cabina repletas de hombres encapuchados con armas y lanzamorteros circulan por las calles de Managua sembrando el terror. Desde las protestas de abril pobladores han logrado grabarlos, pero ahora andan en motos y dan persecución y muerte a pobladores que andan banderas azul y blanco.
También disparan en ráfaga cuando ven grupos de gente en las calles y secuestran a jóvenes. Estos cobraron la vida de cuatro personas entre la noche del jueves y ayer viernes en Managua.
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Marlon Orozco, de 48 años, fue la víctima del jueves. Según sus familiares, pasó comprando combustible junto con Daniel Orozco y otras personas más en la gasolinera que está en un costado del paso a desnivel en Rubenia, luego regresaba a su casa de habitación en Villa Libertad, pero fue perseguido y asesinado por seis turberos que andaban en tres motos. Eran las 11:00 p.m. del jueves 24 de mayo.
Los motorizados vestían pantalones azul, botas militares y llevaban puestos cascos, según los sobrevivientes. Las víctimas se percataron que los seguían cuando esperaban el cambio de luz en el semáforo del Mercado Iván Montenegro.
El vehículo continuó su marcha con dirección al este, sobre la pista a Sabana Grande. Al llegar al otro semáforo, el conductor del carro giró a la derecha, con dirección a Villa Libertad. No obstante, perdió el control del vehículo y pasó sobre un bulevar y se estrelló contra el taller de carpintería Rey de Reyes.
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Los motorizados rodearon el automotor. A Daniel lo obligaron a subir a una de las motocicletas y lo abandonaron a unas cuadras. Mientras, a Marlon le propinaron un disparo en la frente, cuentan familiares de este.
La razón del ataque, según familiares de la víctima, fue portar la bandera de Nicaragua y unas vuvuzelas. Marlon tenía tres hijos, dos de estos estudiaban en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua).
Ataque en Ciudad Belén
La tarde de este viernes las turbas continuaron sembrando el terror. En Ciudad Belén se registraron dos personas muertas y cinco heridas, luego que cuatro camionetas doble cabina llegaron con paramilitares, quienes pasaron disparando por las calles de la ciudadela.
Uno de los fallecidos respondía al nombre de Alejandro Tomás Hernández, de 17 años, quien era habitante de Ciudad Belén. Sandra Hernández, hermana del fallecido, explicó que Tomás se encontraba en la calle cuando las turbas pasaron disparando y no le dio tiempo de escapar.
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“Esos eran de la Policía vestidos de civil, porque estos (señala) son los chavalos de (Ciudad) Belén y ellos no le hacen daño a nadie… pasaron disparando a diestra y siniestra y ahora mi hermano está muerto”, expresó Sandra.
Luego de disparar por la calles, los paramilitares, que iban encapuchados, se enfrentaron a los pobladores armados con machetes y agentes de la delegación policial de Ciudad Belén, quienes dispararon para que la gente se dispersara. En el enfrentamiento uno de los paramilitares recibió un disparo en la frente, por lo que el resto se subió a las camionetas y se dieron a la fuga dejando el cuerpo tirado en la calle.
Según los habitantes de Ciudad Belén, la Policía intentó retirar el cadáver del lugar de los hechos, pero ellos no se lo permitieron. Es por eso que los agentes solo se llevaron la identificación, un arma y unas esposas que portaba el desconocido. El enfrentamiento se produjo a la 1:30 p.m. y a eso de las 5:00 p.m. el cuerpo permanecía tirado.
Policía da una versión distinta de los hechos
Por otro lado, la jefa de Relaciones Públicas de la Policía Nacional, comisionada mayor Vilma Rosa González, leyó una nota de prensa en la que vincula el hecho con la toma de tierras contiguo a Ciudad Belén; sin embargo, el hecho ocurrió en el interior de la ciudadela y los tomatierras que permanecen en el lugar aseguraron a LA PRENSA que ellos no se vieron involucrados en el enfrentamiento.
El cuarto fallecido ayer fue el estudiante Jaime José Reyes Téllez, de 20 años. Según Pablo Cuevas, de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), este muchacho permanecía hospitalizado en el Lenín Fonseca, porque el 9 de mayo paramilitares orteguistas le dispararon en la cabeza, cuando este viajaba en una motocicleta desde el barrio Hugo Chávez y le dieron persecución.
“La familia no ha querido dar declaraciones públicas porque supuestamente trabajan para el Gobierno, pero estamos anuentes a acompañarlos a poner la denuncia ante el Ministerio Público”, agregó Cuevas.
Orteguistas atacan en Boaco
Por otro lado, al menos cuatro personas resultaron gravemente heridas en la comunidad El Quebracho, del municipio de Teustepe, en el departamento de Boaco, luego que una caravana del Gobierno, dirigida por paramilitares, disparara en contra de una pequeña concentración que estaba en un tranque.
José Antonio Cuadra Solano, Luis Alberto Jarquín Sequeira, Julio Ampié y otro poblador aún no identificado son los lesionados del ataque.
De acuerdo con Jarquín Sequeira, él se encontraba junto con su hijo de 2 años de edad, cerca del puente ubicado en esta comunidad, cuando las turbas a bordo de cinco vehículos estatales se detuvieron para disparar.
En otro incidente, poco antes de las 10:00 de la noche de este viernes, un motorizado irrumpió en una de las barricadas cerca de la iglesia Divina Misericordia y disparó contra los estudiantes que permanecen en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua (UNAN-Managua), resultando un herido. Hasta el cierre de esta edición se desconocía la identidad del lesionado, dijo Victoria Obando, una de las estudiantes que permanecen en el lugar.
(Con la colaboración de Melvin Rodríguez Cruz).