La titular del Ministerio de Salud (Minsa), Sonia Castro no respondió sobre el caso del hospital Cruz Azul, que se negó a brindar atención médica al adolescente de 15 años Álvaro Conrado, cuando llegó con una herida de bala en el cuello que recibió mientras apoyaba la lucha de los estudiantes universitarios hace 13 días .
Ante la negativa de los doctores de ese centro hospitalario, el adolescente fue trasladado al hospital Bautista donde fue sometido a una cirugía, pero dos horas más tarde falleció.
Esta tarde Castro participaba en el plantón por “la paz” que organizó el Gobierno en la rotonda La Virgen, cuando LA PRENSA la abordó y le consultó sobre el proceso de investigación que como institución rectora debe llevar en este caso y sobre la posición que mantiene el Minsa al respecto, pero con una expresión de incomodidad la funcionaria pública no se refirió al caso.
“Es una empresa”, expresó entre dientes, pero después continuó respondiendo: “busquemos la paz por todo nosotros, ojalá que en Nicaragua triunfe la paz, triunfe la paz, el amor, como dijo el Santo Padre”, aseveró Castro y poco a poco fue acuerpada por los funcionarios del Minsa que la acompañaban.
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El papá de Conrado, quien lleva el mismo nombre del joven fallecido, se presentó hoy a la Fiscalía, y expresó que la ministra de salud lo llamó para ofrecer ayuda ante cualquier problema de salud que ellos sufran a causa de dicha tragedia.
“Espero que haya justicia, están las pruebas. Mi hijo tenía un disparo contundente de arma de guerra. En el Cruz Azul simplemente tenían que estabilizado y mandarlo a otro lado, pero no lo hicieron”, resintió el padre del adolescente.
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La Ley 423, Ley General de Salud, en el artículo ocho numeral 15, establece que es derecho de los usuarios “recibir en cualquier establecimiento de salud público o privado, atención médica-quirúrgica de emergencias cuando la necesite mientras subsista el estado de grave riesgo para su vida o su salud”.