Cinco jóvenes del Distrito Cuatro de Managua fueron acusados el miércoles pasados por asesinato en perjuicio de Roberto Carlos García Paladino, ocurrido frente al Palí de la P del H, mientras este junto a los ahora acusados resguardaban el centro de compras para que no fuera saqueado por miembros de fuerzas paramilitares conocidos popularmente como Juventud Sandinista, durante la violenta jornada de represión policial contra la población que protestaba contra las reformas del INSS.
Vecinos y familiares de Michael Enrique Peña González de 23 años, Rommel Fabián Guillén de 19 años, Kevin Antonio Martínez Mejía de 17 años, Fernando José Ortega Alonso y Juan José López Oporta, expresaron que los hechos que señala la acusación del Ministerio Público es falsa porque dicen que los chavalos atacaron directamente al vecino, cuando en realidad fue la Policía y miembros de la Juventud Sandinista los que pasaron tirando balas.
“La familia del muerto que también son nuestros vecinos no quieren hablar con los medios porque saben muy bien quienes fueron los que dispararon contra su familiar. Además, quedó vivo porque solo llevaba un disparó por los glúteos y la policía se lo llevó a pesar que él rogó que n o se lo llevaran y hay testigos de eso. No es justo que quieran castigar a inocentes”, dijo Marcia Urbina, vecina del lugar.
LA PRENSA buscó a la familia del difunto, pero no quiso hablar.
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Venganza de JS
Según Urbina, lo que hay es desquite de la fuerza paramilitar porque en un tiempo el joven Michael Peña perteneció a esa agrupación, pero se salió porque no estaba de acuerdo con ir a matar a estudiantes porque su primo es estudiante de la Upolí, y se dedicó los últimos días a trasladar alimentos y agua a los estudiantes en su moto.
“Los de la juventud lo sentenciaron por eso y que algo le iba a pasar, y ahí están las cosas”, agregó la pobladora.
Otros vecinos concuerdan con los hechos narrados por Urbina pero tienen miedo al vandalismo de esta agrupación. También afirman que hay videos de donde los capturaron que fue en lugar diferente donde dice la acusación.
En la acusación también se les señala de atentar contra la seguridad pública de Nicaragua.
“Es injusto lo que están haciendo porque aquí la población estaba resguardando al Palí para que no fuera saqueado. Mi cuñado Rommel Guillén participó en la protesta y estaba en el sector del Puente El Edén resguardando para que la Policía y la JS no se metiera al barrio porque andaban armados”, dijo Libny Leiva, cuñada de Rommel Guillén.
“Lo único que teníamos era agua y café cuando estábamos resguardando el Palí y mi hijo estaba ayudando dando vueltas en su moto para avisarnos si estaban cerca o no los antimotines y los vagos. A mi hijo lo bajaron de su moto, le echaron gasolina diciendo que lo iban a quemar para que aceptara, pero los vecinos del barrio saben que no fue él, pero tienen miedo de hablar”, dijo Liseth González, mamá de Michael.
“Los muchachos estaban resguardando el Palí, pero de repente vinieron los de la JS y se armó el despelote, la balacera y la gente vio que fue la juventud que vino volando balazos”, dijo Carmen López, abuelita de Kevin Martínez.
El expediente está en el Juzgado Séptimo Distrito Penal de Audiencia donde el juez Abelardo Alvir programó audiencia inicial para el 3 de mayo de 2018.
Presentan recursos de amparo
Yonarqui Martínez, quien apoya a la Comisión Permanentes de Derechos Humanos (CPDH) presentó el jueves nueve recursos de exhibición personal por amenaza de detención recurrente en contra de la Policía Nacional.
Cinco de los recursos fueron presentados personalmente por los jóvenes que protestaron y que fueron liberados por la Policía y abandonados en la carretera a Tipitapa.
Luis Manuel Ortíz Hernández, Julio Francisco Chavarría, Marvin Guevara, José Ramón López Vallejos y Juan Chávez López fueron los jóvenes que presentaron de manera personal el documento en los Juzgados de Managua. La abogada presentó cuatro recursos más. “Los jóvenes han expresado que ellos están siendo perseguidos y temen que se les vuelva a detener y entonces nosotros lo que hicimos fue ampararlos, según lo que establece nuestra Constitución Política de Nicaragua”, manifestó la abogada Martínez.
Cuatro de los cinco acusados de asesinato en el barrio Paraísito de Managua tendrán nueva defensa en la próxima audiencia porque sus madres llegaron a pedir ayuda ala Comisión Permanente de Derechos Humanos.