Tras la indignación del pueblo de El Viejo por el bloqueo desde el año 2015 de las aguas del manantial denominado la Fuente Sagrada de la Virgen, trabajadores de la Alcaldía hacen nuevas remociones de tierra para encauzar la vena hídrica que había sido desviada de su curso legendario.
Los católicos de toda Nicaragua viajan a El Viejo anualmente a la peregrinación de la Lavada de la Plata, en honor a la Virgen Concepción de María, cuyo santuario está en esa ciudad y también visitan el manantial, un acueducto subterráneo ubicado en el paso del puente El Limón, que cae al río El Viejo, a 400 metros de la Basílica Menor.
Se presume que esa vertiente nace debajo del altar de la Virgen y hasta ahí llegan los peregrinos a recoger agua para bendición en sus hogares.
Una carta enviada por el concejal liberal Cruz Roberto Navarro a la alcaldesa sandinista María del Tránsito Guevara, explicó que la fuente fue dañada en el año 2015 al momento de darle mejoras al sector.
El manantial desde tiempos precolombinos abastecía en momentos de crisis a las familias de varios barrios que cargaban el agua con sus baldes y panas para el consumo y los quehaceres.
El proyecto de aguas naturales en la legendaria fuente de agua del puente El Limón fue realizada en dos ocasiones, debido a la mala calidad de construcción y en las supuestas mejoras, en las que se ha gastado más de 4 millones de córdobas del presupuesto municipal.
El poblador Frank Rizo lamentó el bloqueo de la fuente natural que los católicos consideran sagrada, “porque el agua proviene de los pies de la Virgen del Trono desde el Santuario Nacional Mariano”, manifestó.
Sadi Corea explicó que el manantial fue descubierto hace años y que el agua era una bendición para el pueblo de El Viejo.
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