A causa de varios impactos de perdigones de escopeta y posiblemente balas de otro tipo de arma de fuego, murió Luisa Díaz Alarcón, de 37 años, la tarde de este jueves 1 de diciembre en la comunidad Zapote Dudú, jurisdicción del municipio de Waslala, en la Región Autónoma del Caribe Norte.
Todavía está bajo investigación policial el móvil del crimen, aunque fuentes vinculadas con las indagaciones presumen que pudo ser un conflicto de propiedad.
Aunque la Policía en Matagalpa tiene meses negando atención e información a los medios de comunicación, trascendió que las autoridades policiales de Waslala buscan a dos sospechosos, incluyendo a Alexander Guillén Alarcón, sobrino de Díaz Alarcón.
De acuerdo con la versión preliminar del suceso, Díaz Alarcón caminaba junto a sus hijas Yanira Eloísa y Maribel Siles Díaz, acompañadas por Ezequiel Barrera Díaz, por el potrero de una propiedad vecina a su casa en la misma comunidad Zapote Dudú.
Regresaban del centro escolar El Zapote y 500 metros antes de llegar a su casa, de una parte montosa salieron dos hombres y uno de ellos presuntamente era Guillén Alarcón, quien portaba una escopeta calibre 12.
Guillén Alarcón, de aproximadamente 19 años, estaba con otro hombre cuya identidad es investigada por la Policía y también estaba armado con una pistola.
“Aquí viene esta vieja…”, habría dicho Guillén al otro hombre, refiriéndose a Díaz Alarcón, y de inmediato disparó varias veces la escopeta; el desconocido también disparó.
Los acompañantes
Quienes iban con Luisa Díaz Alarcón corrieron para salvarse de los disparos y volvieron una hora después, encontrando a la mujer con varios impactos en el brazo derecho y otros más en el tórax. También tenía la mano izquierda cercenada.
Yanira Eloísa, una de las hijas de la víctima, fue quien denunció el caso ante la Policía y los investigadores llegaron al sitio para realizar las indagaciones y peritajes correspondientes.