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Cartas al Director

l sábado pasado, después de un año de estar estudiando mi maestría en Creación de Empresas Innovadoras, regresé a Nicaragua. Fue un viaje muy emocional, lleno de sentimientos encontrados, de mucha tensión e incertidumbre, pues solo tenía cuarenta minutos para hacer una escala en Miami.

Anécdota con la “azul y blanco”

El sábado pasado, después de un año de estar estudiando mi maestría en Creación de Empresas Innovadoras, regresé a Nicaragua.
Fue un viaje muy emocional, lleno de sentimientos encontrados, de mucha tensión e incertidumbre, pues solo tenía cuarenta minutos para hacer una escala en Miami. Era muy probable que perdiera la conexión y esto implicaba dormir sola en un hotel, en lugar de estar con mi familia después de un año. Decidí tomar el riesgo.

Al aterrizar en Miami, corrí sin parar, me temblaban las piernas y más los brazos, cargaba una maleta de mano de cincuenta libras y un vestido de novia de… muchas libras. Mientras corría, escuchaba en los parlantes que estaban cerrando la puerta del vuelo a Managua… A correr más rápido.
Finalmente llegué y la puerta estaba abierta. Me temblaban los brazos tanto que simplemente solté todo. Hasta mi vestido de novia. Mi mayor sorpresa no fue alcanzar el vuelo, fue encontrarme en la puerta a los jugadores de la “azul y blanco”, el equipo nacional de futbol. Qué honor compartir el vuelo con mi sele después de que se lucieron 3-2 contra Jamaica.

Dejé mis cosas en el suelo mientras los felicitaba: “Felicidades muchachos. ¡La partieron!” Ellos, preocupados, me ofrecieron ayuda en cargar mis cosas. Yo acepté, ya no podía más. “El Copete”, defensa titular de la selección, tomó mi vestido de novia, y otro jugador tomó mi maleta de mano de cincuenta libras. Empezamos a caminar por la manga del avión, intercambiando algunas frases sobre mi vestido de novia y el juego de Jamaica. En ese momento una antipática agente de American Airlines corrió detrás de mí diciéndome: “Señorita, señorita, espere, usted no puede llevar dos maletas de mano. ¿Cómo es que entró con dos maletas?” Ella no terminó sus frases a regañadientes cuando los jugadores ya le estaban contestando por mí: “Mire señora, yo no llevo nada, puedo llevar el vestido conmigo”, le dijo “El Copete”, y el otro jugador dijo lo mismo.

En fin, la señora no abrió más la boca y seguimos caminando. “Gracias muchachos”, les expresé, juntando las manos como cuando uno reza. Seguimos caminando, me hicieron preguntas curiosas sobre mi vestido, “¿Dónde lo compraste?” “¿Cuándo te casás?” Ya entrando al avión, una azafata, en esta ocasión muy amable, le quitó el vestido a “El Copete” para colgarlo en el clóset. Él, preocupado, reaccionó: “No señora, este vestido va conmigo”. Ella explicó que solamente lo iba a colgar. Aun así él me quedó viendo y me dijo: “¿Segura? ¡Yo te dije que yo me lo llevo, por mí no hay falla!” Insistiendo en cumplir su compromiso. “¡Sí, tranquilo! Ya me ayudaron suficiente ¡Mil gracias!”

Una vez que todos terminaron de abordar empezaron los aplausos y las fotos. Tampoco podían faltar selfies con los pasajeros, mientras la capitana del avión (sí, era una mujer) los saludaba por los parlantes. El vuelo fue una merecida celebración.
Ellos, el pasado martes en la cancha lo dieron todo aunque no ganaron el partido de vuelta. Pero vale la pena compartirles esta historia, que muestra un poco el lado humano de nuestros jugadores, y enorgullecernos más de ellos.

¡Gracias “azul y blanco”! Por tu talento en el deporte, por la ilusión que le dieron a un país completo y por ser ejemplo de generosidad y humanidad que caracteriza a los nicaragüenses.

Sara Lila Cordero

Observación electoral

Recientemente el reverendo Sixto Ulloa, procurador de Participación Ciudadana de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos, en una entrevista a un medio de televisión dijo que dicha Procuraduría ya está preparando a unos cinco mil observadores electorales que participarán en las próximas elecciones nacionales.

Sabemos que estos observadores son militantes y personas afines al partido Frente Sandinista. Entonces, ¿qué carácter neutral podrán tener estos observadores electorales?
Estos observadores dirán que todo marcha bien y que se está respetando la Ley Electoral y la Constitución. Aunque se den cuenta de todas las anomalías que se puedan dar en este proceso, por el hecho de ser militantes sandinistas y observadores de esta Procuraduría jamás van a denunciar un acto anómalo o fraude electoral. No tienen ninguna autoridad de imparcialidad y neutralidad como para confiar de sus funciones, igual a los observadores que proponga el presidente del Consejo Nacional de Universidades (CNU), Telémaco Talavera, que son jóvenes que provienen de sectores afines al Frente Sandinista y serán acreditados como observadores para que avalen todas las barbaridades que se cometan en el próximo proceso electoral.

Además, si estos observadores en verdad van a actuar con imparcialidad y neutralidad, desde ya le propongo tanto a la Procuraduría para la Participación Ciudadana como al mismo CNU, que ejerzan sus funciones desde la verificación ciudadana para que den a conocer a cuántos ciudadanos no les han entregado sus cédulas o documentos supletorios para ejercer su derecho al voto. Y cuántos la tienen en sus manos, aprobados y publicados en los padrones de verificación pero no los han recibido por parte de los funcionarios del Consejo Supremo Electoral (CSE) para poder ejercer el sagrado derecho al voto.

También debemos observar que el CSE cumpla con la Ley Electoral en el sentido que seis meses antes de las elecciones nacionales —o sea en mayo del 2016— hayan cedulado a todos los nicaragüenses.

La Iglesia católica, las organizaciones de la sociedad civil y la misma oposición política deberían de ir proponiendo también a observadores nacionales e internacionales, porque no es posible que el próximo proceso electoral nacional solo sea observado por observadores afines al Gobierno.

Máximo M. Castillo (Mexicano)

Dictamen fiscal

El contribuyente, empresario y retenedor como usuarios de los servicios contables deben saber lo que la ley dice acerca del dictamen fiscal. Para el Gobierno también es de sumo interés que los usuarios antes mencionados dominen con claridad que:

El arto. 72 del Código Tributario vigente en Nicaragua dice textualmente que: para efectos de presentación o revisión de declaraciones tributarias, los contribuyentes o responsables tendrán derecho a asesorarse y escoger el nombre de las firmas privadas de Contadores Públicos y/o Contadores Públicos Autorizados (CPA), para formular dictamen fiscal y hacer uso del mismo.

La Administración Tributaria publicará en los tres primeros meses del año fiscal los nombres de las firmas privadas de Contadores Públicos y/o Contadores Públicos Autorizados (CPA) para formular dictamen fiscal.

Para tal efecto, el profesional de la contaduría es el único investido de ese derecho por la Constitución Política de Nicaragua, autorización necesaria para formular el dictamen fiscal de un contribuyente, con plena capacidad técnica aun para hacer informes de auditoría y certificaciones de estados financieros.

Los diferentes usuarios de los servicios profesionales de un contador público deben de tener el cuidado y la responsabilidad de constatar primero que la vigencia de esa investidura constitucional por parte del profesional, lo cual pueden hacerlo consultando la página web del Colegio de Contadores Públicos de Nicaragua o con la acreditación profesional y constitucional de Contador Público Autorizado (CPA) emitido por el CCPN.

El profesional de otra disciplina, como el economista, banca y finanzas y administrador de empresas, entre otros, no posee la investidura para ejercer este derecho. Tampoco el egresado de la bella profesión de abogacía, que teniendo este último fe pública cuando ha alcanzado sus requerimientos y exigencias de ley, no tiene el derecho de certificar estados financieros ni formular dictamen fiscal, en concordancia con el arto. 153 del Código Tributario de Nicaragua.

Eduardo Otoniel Urtecho Valverde

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