LAPRENSA/ARCHIVO
La amenaza de una reducción en la producción de caña, provocada por el déficit de lluvia que se registró durante el inicio de la época lluviosa, y un mercado internacional, incluido el de la Unión Europea (UE) con precios deprimidos, ensombrecen el panorama de la zafra azucarera 2014-2015 que inicia en los próximos días.
Esto amenaza con frenar el ritmo de crecimiento registrado por esta industria en los últimos años y ha provocado el aplazamiento de algunas inversiones dirigidas al incremento de la producción, pero la diversificación que ha alcanzado le permite compensar estas afectaciones.
El gerente general del Comité Nacional de Productores de Azúcar (CNPA), Mario Amador Rivas, asegura que existen opiniones muy encontradas en torno a la disminución en la producción que provocarán los daños causados por la sequía, a la caña que se sembró entre mayo y junio, ya que al no haber lluvia se quedó chiquita.
Bernardo Chamorro, gerente general del Ingenio Monte Rosa, añade que esta zafra va a ser muy retadora, porque al haber menos caña hay menos azúcar y a eso hay que agregarle que los precios han caído a los niveles más bajos de los últimos dos años y que los costos de los insumos se han incrementado. El panorama no es tan bueno como en años anteriores.
Amador confía en que el daño no sea muy severo, porque no toda la caña se siembra en mayo, sino de acuerdo con planes graduales de corte y siembra de cada ingenio. Lo que se va sacando se va sembrando y además hay caña nueva que se sembró entre diciembre y febrero que puede generar un efecto de compensación.
También hay técnicos que aseguran que la reducción del tamaño de la caña producirá menos toneladas por manzana, pero producirá más azúcar porque al tener los nudos más cortos está más concentrada. Pero todavía hay mucha incertidumbre en cuanto a lo que va a pasar, porque si sigue lloviendo normalmente, sobre todo en la caña que está bajo riego este efecto será muy leve, pronostica Amador.
Según el gerente general del CNPA en la última semana de octubre vamos a tener el primer estimado de producción… Vamos a andar por unos 16.5 millones de quintales. Será un crecimiento muy pequeño con respecto al ciclo anterior pero durante la zafra puede crecer y llevarnos a superar los 17 millones de quintales como habíamos anticipado.
Del total de la producción unos 5.8 millones de quintales se consumen localmente, el resto se coloca en el mercado internacional.
Con la nueva proyección de 16.5 millones de quintales, el crecimiento sería solo de unos cien mil quintales con respecto a la zafra 2013-2014 que concluyó en mayo, con un récord de producción de 16.39 millones de quintales.
A estos efectos de la sequía habrá que sumarle la baja del precio en el mercado internacional, que hace algunas semanas se ubicó en 14 dólares por quintal.
Los especialistas en mercados externos atribuyen la reducción de precio a que en agosto y septiembre había mucha azúcar disponible para entrega inmediata, pero con el inicio de la salida de los pedidos el precio comenzó a recuperarse.
[doap_box title=”Terminal pospuesta” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]
La industria planea invertir veinte millones de dólares en la construcción de una terminal de exportación, cuya bodega estará unida al Puerto de Corinto a través de una banda de exportación para autocarga.
El Gobierno pospuso la entrega de permisos hasta que se defina el proyecto del Gran Canal. Sin embargo, el gerente general del Consejo Nacional de Productores de Azúcar, Mario Amador Rivas, asegura que “tarde o temprano tendrá que construirse”, ya que actualmente se cargan entre dos mil y cuatro mil toneladas por día y con esta banda se pueden cargar hasta dos mil toneladas por hora, lo que reduce los costos de flete.
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Esperemos que en noviembre cuando se confirme la cantidad de azúcar que va a salir de Brasil y se vea que en Centroamérica no habrá el crecimiento que se había anunciado, el precio llegue hasta los 16 o 17 dólares por quintal e incluso alcanzar los 19 dólares, estima Amador.
Lo bueno es que gran parte de la producción de la zafra que está por iniciar, se colocó hace casi un año a unos 18 dólares por quintal. El precio actual, (la semana pasada cerró en 16.55 dólares) afectará a la siguiente zafra, ya que la gran parte de la cosecha se coloca entre noviembre de un año y marzo del siguiente.
Por su parte Chamorro asegura que se tiene que reducir costos y seguir mejorando la eficiencia.
U.E. YA NO ES ATRACTIVA
Este año se enviarán a la Unión Europea las 22,300 toneladas (490,600 quintales) que contempla el pilar comercial del Acuerdo de Asociación (AdA). Sin embargo, este mercado dejó de ser atractivo, ya que no ofrece sobreprecios de hasta diez dólares por quintal. Este año se vendió a un promedio de 20 dólares por quintal, un dólar por encima del precio del mercado internacional al momento de concretar la venta.
Además a partir del 2017 desaparecerán las cuotas de producción y eso permitirá que los países de Europa puedan producir más y se verán obligados a importar menos, dice Amador.
Para compensarlo, han solicitado que se les amplíe la cuota de treinta mil toneladas que contempla el Tratado de Libre Comercio con Taiwán, que además paga un promedio de dos dólares por encima del precio del mercado internacional.
El sector han pedido que la cuota se duplique, aunque estiman que se les puede dar más, ya que desde ese mercado se puede reenviar el producto hacia otras plazas como China. Son gestiones que la Embajada de Taiwán cree que se pueden concretar, indica Amador.
[doap_box title=”Etanol a la baja” box_color=”#336699″ class=”aside-box”]
La caída del precio del etanol en el mercado internacional ha provocado que su producción deje de ser atractiva. “El Gobierno de Estados Unidos está convirtiendo mucha azúcar de jarabe de maíz en alcohol, entonces el precio ha bajado bastante. Estamos produciendo unos diez millones de litros a partir de melaza, pero la capacidad es de sesenta millones de litros”, afirma, Mario Amador, de la CNPA.
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Estos altibajos provocados por el clima y los bajos precios, son compensados por la diversificación y eficiencia alcanzada por esta industria, que percibe ingresos adicionales por la venta de la energía, melaza, alcoholes y etanol, que producen a partir de la caña.
Actualmente venden al sistema nacional de distribución unos 64 megavatios que son producidos por los ingenios Monte Rosa y San Antonio. Se espera que para finales de mayo del próximo año con la inversión de 105 millones de dólares el Ingenio Montelimar amplíe la capacidad de producción y comenzará a generar 36 megavatios, lo que permitirá que a partir de la zafra 2015-2016 se vendan al sistema cien megavatios, que generarán cincuenta millones de dólares en ingresos. Mientras tanto el proyecto de generación del Ingenio Benjamín Zeledón, que invierte unos ochenta millones de dólares, podría estar listo en los próximos dos años.
El ingenio Santa Rosa tiene previsto invertir al menos cien millones de dólares en la ampliación de la capacidad de procesar 16,000 a 18,000 toneladas por día para incrementar la generación de 32 a 50 megavatios. Sin embargo, esta inversión seguirá pospuesta por los próximos dos o tres años o hasta que haya condiciones más óptimas.
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