Jeniffer Castillo Bermúdez
Ser la mejor alumna no es algo nuevo para ella. Aunque le apena reconocer la cantidad de diplomas que ha recibido por su excelencia académica, la estudiante del Madre del Divino Pastor, de Diriamba, Carazo, admite ser una coleccionista de diplomas, medallas y bandas de excelencia.
En el 2009 fue la mejor alumna de primaria en Nicaragua, entonces estaba en sexto grado y ya tenía la mayoría de los casi sesenta diplomas de excelencia que su mamá Rosa Amina Mercado, de 58 años, guarda como su tesoro en una carpeta grande.
Pero no creás, hablar de la mejor alumna de secundaria del país, esta vez, no se resume a libros, ni a horas eternas de estudio. De hecho, te contamos que en su escuela sus compañeros de undécimo grado no la ven como “la mejor, mejor de todos”, cuenta su compañero de salón José Antonio Mercado.
Aunque es la mejor alumna de secundaria del país, Rosario Emilia no lo presume. Para no hacer grandes sus calificaciones de cien puntos, asegura que “un alumno excelente es aquel que quiere superarse y no necesariamente aquel que tenga las mejores calificaciones”. ¿Qué te parece?
¿CÓMO LE HIZO?
Aparte de su dedicación y empeño, sus profesores, la escuela y su familia forman parte de la fórmula que le permitirá recibir en dos semanas una nueva banda de excelencia, otro diploma y una medalla.
UNA CHICA RELAJADA
Nunca se cansa de conversar con su mamá, pues considera que es la mejor experiencia que un adolescente puede tener después de terminar las tareas de la escuela.
Rosario Rivas Mercado estudia solo dos horas y media al día y después se dedica a salir con sus amigas o sus primos. Las canciones de The Wanted (una banda británica-irlandesa) es el acompañante perfecto mientras hace sus deberes. Eso sí, su teléfono celular nunca falta.
Es amante de las redes sociales y cuando sale con sus amigas casi no hablan de las clases, aunque tengan problemas con algunos temas en Matemáticas o Lengua y Literatura.
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