Un grupo de nicaragüenses que reside en Miami, Estados Unidos, protestó ayer frente a las instalaciones del Consulado General de Nicaragua, en contra de la vapuleada que turbas de la Juventud Sandinista y encapuchados a bordo de camiones de la Alcaldía de Managua perpetraron la madrugada del sábado contra los ancianos y jóvenes que apoyan la demanda de pago de una pensión reducida para los ancianos.
“¡Ladrones paguen la pensión reducida a los ancianos! ¡No más violencia! ¡No más secuestros y atropellos contra la juventud! ¡Nicaragua libre!”, fueron parte de las consignas de los manifestantes.
Funcionarios del Consulado llamaron a la Policía, tras ver la presencia de los protestantes. Tres patrullas se hicieron presentes en la sede y uno de los oficiales entró al Consulado y luego cruzó la calle para conocer el motivo de la presencia. Sin embargo, las autoridades permitieron que el grupo siguiera en el lugar y solo recomendaron tener cuidado con el tráfico vehicular.
El cónsul de Nicaragua en Miami, Luis Martínez, dijo que él no llamó a la Policía porque no tiene miedo y luego descalificó la presencia de los asistentes y del número de personas presentes.
Martínez también repitió el mismo discurso oficialista que: “No hay dinero para pagar la pensión” de los ancianos y que la “derecha” es la responsable del levantamiento de las personas de la tercera edad que demandan el pago de una pensión reducida.
“Exigimos al Gobierno acciones coherentes y sobre todo acciones que no promuevan la confrontación para eliminar la tensión social que prevalece, y por ello pedimos que se instale una mesa inmediata de diálogo respetuoso con la UNAM”. Además, demandó a la Policía “acciones firmes” para garantizar la seguridad ciudadana y el respeto a la dignidad de todos los nicaragüenses y que garantice la protesta social mientras se mantenga.
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