Los pliegues dibujados por los años en el rostro de Norberta Carrero se acentúan por la zozobra que vive ante la posibilidad de que su hija Rosa Altamirano sea arrestada, igual que otros opositores al gobierno de Daniel Ortega, en Darío, Matagalpa.
“Quiero que por favor me ayuden con mi hija, ella no ha hecho nada los que agredieron andan tranquilos y mi hija no ha agredido a nadie vean por ella, si le pasa algo mi muerte sería esa”, decía Carrero llorando este sábado afuera del Complejo Judicial de Matagalpa al diputado Pedro Joaquín Treminio, de la Alianza Partido Liberal Independiente (PLI).
Treminio, quien llegó a los Juzgados junto con otros diputados del PLI, ofreció: “No la vamos a dejar sola, claro que le ayudaremos”.
SOLO CONTRA OPOSITORES
Altamirano y otros nueve miembros del PLI fueron acusados por una serie de delitos suscitados en un enfrentamiento entre liberales y orteguistas el 8 de enero en Darío y a pesar de que hubo denuncias recíprocas, solo prosperaron las interpuestas contra los opositores al partido de gobierno.
De la decena de opositores acusados, Ángel Antonio Gómez Matamoros y Pedro Joaquín Valle Gómez son los únicos procesados. El primero es procesado como supuesto cooperador necesario de los delitos de motín y asociación para delinquir y el segundo como presunto autor intelectual de esos ilícitos, conspiración y proposición, daño agravado, lesiones graves y lesiones leves en concurso real.
La Fiscalía imputa a Altamirano los mismos delitos que a Valle porque supuestamente pagaron un anuncio en una radio local convocando a manifestarse el mismo día en que los orteguistas celebraban el fraude electoral del año pasado.
Valle enfrentó ayer la audiencia inicial del proceso. María Josefina Vásquez, titular del Juzgado Único de Distrito Penal de Audiencias de Matagalpa, desestimó todas las peticiones del defensor Lulio Marenco y aceptó todo cuanto pidieron el fiscal Roberto Matamoros y el acusador particular adherido Wilford Bustamante, este último en representación del designado alcalde orteguista de Darío, Ángel Cardoza.
Marenco alegó diversos principios constitucionales a favor de Valle, pero la judicial admitió el intercambio de información y pruebas ofrecidos por la Fiscalía, mantuvo la prisión preventiva en contra del acusado y remitió la causa para un juicio el próximo 24 de abril.
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