COSTA RICA/ DIARIO EXTRA
Más de 10 balazos seguidos se escucharon la noche del jueves en la Ciudadela León XIII, en Tibás, luego muchos vieron al nicaragüense, identificado como Joel Campos, correr unos metros y sin fuerzas, caer abatido sobre una acera en la esquina noreste de la escuela del lugar.
El cuerpo yacía boca abajo, manchado de sangre e inmóvil. Una muchedumbre se acercó a ver al hombre tendido. Ya nada se podía hacer por él. Al menos cinco de los 10 balazos lo habían impactado.
Según relataron algunos vecinos del lugar, al hombre lo liquidaron como a las 10:30 de la noche, cuando llegó a realizar una compra a la soda y taquería RyR. En ese momento, discutían dos hombres en la calle.
Las primeras versiones apuntan a que uno de los hombres que discutía en la vía pública tenía problemas con Campos, por lo que al verlo llegar cambió de objetivo y sin pensarlo mucho apuntó al nicaragüense, a quien al parecer le había jurado la muerte.
MÓVIL
Extraoficialmente se indicó que el ahora fallecido se había visto involucrado en un asesinato ocurrido hace unos días en la zona y que además tenía antecedentes delictivos en su país de origen, por lo que una venganza podría haber sido la causa del crimen.
Las autoridades policiales investigaban ayer si el hombre mantenía diferencias con otras personas para saber si esa versión tomaba fuerza.
No obstante, otros vecinos le indicaron a la Policía que el homicidio se produjo por el tema de las drogas, aunque esa versión también se investiga por parte del OIJ.
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