María José Uriarte R.
El secretario general del Frente Sandinista, Daniel Ortega, desestimó la hipótesis que planteó este domingo el periodista William Grigsby, según la cual el asesinato de Carlos Guadamuz era el resultado de una pugna entre grupos de poder del partido sandinista.
En una entrevista a LA PRENSA, el periodista dijo que el asesinato de Guadamuz pretendía golpear la candidatura de Dionisio Marenco para alcalde de Managua, para luego ser sustituido por un candidato afín a lo que Grigsby llama “el capital sandinista”.
Entre las personas que menciona Grigsby en el “capital sandinista” están los hermanos Coronel Kautz y el general en retiro Humberto Ortega Saavedra, quien mantiene diferencias con su hermano Daniel, y a quien en algunas ocasiones ha criticado por postularse como candidato a la Presidencia.
Daniel Ortega, considera que el tema del asesinato de Guadamuz Portillo se presta a muchas especulaciones, hipótesis, y manipulaciones, pero niega que el Frente Sandinista, o algún miembro de la dirigencia, haya planificado el asesinato de Guadamuz. Tampoco comparte que sea una “pasada de cuentas” de grupos de poder.
Inmediatamente después de la muerte de Guadamuz, la familia del periodista acusó directamente a Ortega, Dionisio Marenco y Lenín Cerna, de ser los autores intelectuales del crimen, ya que el periodista desde sus programas, mantenía ataques constantes contra ellos, además de existir una rencilla personal, desde que le fue quitada la Radio Ya.
Para Ortega son las autoridades competentes que tienen el caso en sus manos, a quienes les corresponde definir la profundidad de los hechos y llegar hasta los autores intelectuales, si es así, para ponerlos después a la orden del Poder Judicial.
En este momento se le sigue proceso a William Hurtado, autor material, y Luis Alfredo García como cooperador necesario por suministrar el arma, al igual que Margarita Membreño como cómplice.
“Estas autoridades han venido dando resultados. El caso está ya en manos del Poder Judicial, y eso es lo que tenemos que favorecer y no estar especulando”, precisó Ortega.
Sin embargo, en su entrevista, Grigsby dice que la Policía Nacional conoce ya la identidad del o las personas que emitieron la orden de asesinar a Guadamuz, pero se encuentra atrapada ante la presión de diversos sectores, por el peso político que representan los probables implicados en el caso.
DE ACUERDO CON MURILLO
Daniel Ortega dijo compartir la carta pública de su esposa Rosario Murillo, donde cuestiona la forma que la dirigencia abordó el asesinato de Guadamuz, además de no expresar una condena al mismo. Ortega dice que es importante para ellos retomar el mensaje de la reconciliación, del entendimiento y el amor. “No alejarnos de ese mensaje que ha sido nuestro desde hace tiempo y no caer en las provocaciones porque a veces caemos un poco en las provocaciones”, justificó el secretario general del FSLN.