Irán aseguró este lunes que la carga de cuatro buques que fueron incautados y confiscados por Estados Unidos en días pasados transportaba combustible iraní y su destino final era Venezuela.
“Los cargamentos se cargaron desde Irán, pero ni los barcos ni los cargamentos pertenecían a Irán, y Estados Unidos declaró la victoria en medio de esto”, dijo el ministro de Petróleo iraní, Bijan Namdar Zanganeh el lunes en una sesión informativa en Teherán. “El combustible era iraní, pero se había vendido a Venezuela y se había liquidado su pago”, dijo
El presidente de Irán, Hassan Rouhani, afirmó el pasado sábado que era una “mentira” que los buques eran iraníes. Los barcos afectados fueron identificados como Bella, Bering, Pandi y Luna.
Para incautar el cargamento, Estados Unidos contrató embarcaciones y luego transportó la carga. De acuerdo a información publicada por el sitio Bloomberg, James Malloy, comandante de la Quinta Flota de Estados Unidos con base en Bahréin informó que dos de los traslados ocurrieron en el Golfo de Omán y los otros dos ocurrieron frente a la costa de Mozambique.
Malloy además afirmó este lunes que los buques transportaban 1.1 millones de barriles de gasolina. Según las autoridades de Estados Unidos esta incautación representa la mayor hecha a combustible proveniente de Irán.
“El gobierno anunció hoy que ejecutó con éxito la orden de incautación y confiscó la carga de los cuatro buques sumando aproximadamente 1,116 millones de barriles de petróleo”, indicó el viernes pasado en un comunicado el Departamento de Justicia de los Estados Unidos.
El gobierno de Donald Trump utilizó la justicia para realizar la confiscación del cargamento de combustible como parte de su estrategia contra el gobierno de Maduro en Venezuela, al que no reconoce.
Reacciones
Sobre la incautación hecha el pasado viernes, el principal diplomático estadounidense para América Latina, Michael Kozak, afirmó que este es un “paso importante”.
El empresario iraní Mahmud Madanipur, quien presuntamente tiene vínculos con la Guardia Revolucionaria, organizó envíos para Venezuela utilizando compañías de fachada offshore y transferencias de barco a barco para evitar sanciones contra Teherán. El gobierno de Trump mantiene tensas relaciones con Irán después de que en 2018 Estados Unidos se retiró del acuerdo multinacional para congelar el programa nuclear de Teherán.
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El jueves, el embajador de Irán en Venezuela dijo que los reportes de que los petroleros iraníes habían sido capturados eran “otra mentira y guerra psicológica” de Estados Unidos.
La producción de combustible en Venezuela ha caído a aproximadamente a una cuarta parte de su capacidad de 2008 y su economía ha sido devastada por seis años de recesión; por lo que Irán ha enviado varios barcos de gasolina este año a Venezuela para ayudarle a solventar esa escasez.
Según datos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), la producción de Venezuela en julio se situó por debajo de los 400,000 barriles diarios, un nivel equivalente al de 1934.
En medio del desplome de la industria y de las sanciones de Estados Unidos, Venezuela, que solía refinar suficiente petróleo para sus propias necesidades, debió recurrir a aliados como Irán para aliviar una desesperada escasez de combustible.