Desafortunadamente, la oposición no tiene un buen padrino que le dé buenos consejos. Hay pugnas y serias contradicciones dentro de ella.
Javiera Urbina
Alianza sin excepción
Al parecer la oposición sigue en su afán de decepcionar más al pueblo en la búsqueda de la ansiada unidad nacional para las próximas elecciones.
¿Por qué no se callan?
En Nicaragua, las decisiones de los árbitros electorales son inapelables desde el 2008, año en el que se cometió un escandaloso fraude electoral y a partir del cual se instauró un sistema dictatorial oprobioso.
Entre Trump y Ortega no hay comparación
En Nicaragua, la corrupción, la represión, los asesinatos cometidos en mayor grado por las fuerzas policiales, paramilitares que reprimen al pueblo, corroen a Ortega.
Hay que corregir los errores
Recordemos que el Frente Sandinista desde la clandestinidad como grupo armado encabezó la oposición en la lucha contra Somoza
Los medios orteguistas ante el coronavirus
El avance del Covid-19 una vez más vino a dividir al gremio de comunicación. Para algunos hay conmoción y para otros hay aparente normalidad. Creo que hay que evitar las reacciones distintas sobre la gravedad porque podría provocar clímax.
¿Candidaturas a la vuelta de la esquina?
En términos beisbolísticos hay que llenar las bases para dar de cuadrangular y ganar el juego. Estamos en periodo preelectoral
Vitalidad de LA PRENSA
El régimen ya cobró su primera víctima: El Nuevo Diario. En la década del 90 se cerró el diario Barricada, pero no fue por política de Estado, ni por censura, sino por la mala política administrativa del frentismo
La situación de las mujeres en las maquilas
La maquila llegó a Nicaragua como una opción de mano de obra ante el creciente desempleo y la débil recuperación económica después del conflicto armado contra Somoza
No se puede ni se debe callar
Así está Nicaragua. Es evidente e insoportable el persistente asedio de la policía en las casas habitación de los ex presos políticos, y la constante persecución a los vehículos de los dirigentes de la Alianza Cívica y la UNAB