El cementerio de Saapanta, ubicado en una pequeña aldea de Rumania, a ocho kilómetros de la frontera con Ucrania, es famoso en el mundo por sus singulares y coloridas tumbas que llevan en el centro la caricatura de la profesión del difunto. El cementerio es una de las visitas más recomendadas de Rumania, una región conocida por sus inmensas iglesias de madera.

También lea: Hashtag, el símbolo más popular.

Los epitafios describen de manera original y poética sucesos sobre la vida del fallecido. Algún episodio humorístico, alguna enseñanza o la historia de cómo falleció. El azul es el color que predomina en este lugar único por su ambiente.

Puede leer: ¿Le gustaría dormir en una barrica de vino?

Los orígenes del Cimitirul Cesel din Sapanta (cementerio alegre de Sapanta) están vinculados con Stan Ioan Patras, un artista local que empezó a esculpir las peculiares lápidas en 1935. Para 1960 todo el cementerio fue poblado con cerca de 800 cruces de madera de roble, protegidas de la intemperie bajo una especie de tejado, convirtiendo este espacio en un museo al aire libre, describe el sitio web Muy interesante.