Son uno de los mayores atractivos turísticos de Venecia y pocos turistas se van de la ciudad sin haber hecho un recorrido a bordo de estas embarcaciones de remos. Aquí algunos datos sobre las románticas y legendarias góndolas venecianas.
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Uniformes
Originalmente, a finales del siglo VII, las góndolas estaban pintadas en distintos tonos muy llamativos, de forma que destacaban. Actualmente, todas las góndolas tienen que estar coloreadas en tono negro, de acuerdo con normativas de la ciudad.
Profesión
Ser gondolero o pope (persona que conduce la góndola) no es fácil. El aspirante debe pasar una serie de pruebas de selección que hace el Ayuntamiento de Venecia. La primera es hacer un examen para formar parte de la Escuela de Gondoleros.
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Cuando aprueban, los aspirantes se enfrentan por las plazas que, en ese momento, estén en juego. Cada año suelen presentarse unas 150 personas, pero solo unas veinte lo consiguen.
El gondolero además de estar en buena forma física, debe saber diferentes idiomas y conocer la historia de la ciudad.
Extraordinarias
La forma de la góndola es larga y estrecha. Habitualmente miden 11 metros. Las más grandes pueden llegar a alcanzar un peso de 600 kilogramos. Las góndolas no son simétricas, su lado izquierdo es más ancho que el derecho.
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El hierro de la proa, el llamado peine, hace de contrapeso y evita que la barca se vuelque. Sus seis dientes de acero representan a los seis barrios de Venecia. Están hechas de 280 piezas y su construcción puede durar un año.
Semáforo
Las señales de tráfico de Venecia son muy llamativas. En el Río Nuovo está el único semáforo acuático de toda la ciudad.
